i7 Doletin de la Real 5cademia Gallega
''UNA CARTA DEL INFANTE D. JUAN DE AUSTRIA
AL CONCEJO DE SANTIAGO
(A ?0 1668)
Despu?s de permanecer unos d?as en la ciudad del Ap?stol, lleg?
? la. de la Coru?a, en 21 de Abril de 1668, el Infante D. Juan, hijo bas
tardo de Felipe IV, con objeto de embarcarse erg aquel puerto al frente
del Ej?rcito y Armada que all? se reun?a con' destino ? Flandes, obede
ciendo as? lo ordenado por "la Reina Gobernadora do?a Mariana' de
Austria.
M?s, habiendo llegado ? convencerse de que esa determinaci?n con
que trataba de alej?rsele del reino, respond?a ? un manejo del padre'
1' verardo Nithard, confesor y privado de la Regente, fu? defiriendo el
viaje, no falt?ndole pretextos para suspenderlo definitivamente, al lle
garle la noticia de haber sido preso por orden de la Reina, y tres horas
despu?s ahorcado, su gran amigo el aragon?s D. Jos? Malladas.
Confinado luego ? su priorato de Consuegra, en donde se le mand?
permanecer hasta nueva orden, corta fu? all? su estancia; pues habien
do llegado ? saber que se intentaba reducirlo ? prisi?n y llevarlo al
alcazar de Segovia, huy? de su confinamiento, refugi?ndose en Torre
de Lledr . Desde este punto, dirigi? al Concejo de Santiago, la siguiente ?
? carta, documento in?dito y de sumo inter?s para la historia general:
?
Aunque supongo que abr?n llegado ya a la noticia de V. S. las'
causas que me reduxerou a precisa obligaci?n d? poner en seguridad
mi persona y yo he deseado participarlas ? V. S. como atenci?n tan
propia del singular afecto y voluntad que siempre me ha deuido el co
rnun y particular de esa Nouil?ssima Ciudad, los embarazos de mi mo
lesta peregrinaci?n me lo han impedido hasta aora, pero ya que con el
Divino fauor he llegado a estos Paraxes, no he querido dilatar un pun
to el participarlo ? V. S. y darle noticia mas extensa de los ciertos mo
tinos de mi impensado mouimiento que fueron en dos maneras, los
primeros y de mayor realce que tocauan al seruicio del Rey nro. Se?or,
conseruazion de sus Reinos y rep?tazion y onor de todos sus vasallos,
y los otros que miraban a mis particulares en que no me dilatar? por
ser yo el inmediato ynteresado y porque a vista de aquellos los he