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bolet?n de la Real jtcademia Gallega 47
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(1) Quede sentado que estos Documentos Pontevedreses los llamo colonia
nos, como llamo tambi?n coloniana la nueva teor?a fondada .en ellos, y colo
t. niana la correspondiente tesis, y en la hip?tesis de Garc?a, de la Riega y sus con
tinuadores. ?
(2) Esta consideraci?n de los Documentos Pontevedreses; como fuente del
tema COL?N ESPA?OL, es patente en el libro que Garc?a de la Riega public? con , ?
ese mismo t?tulo en 1914; pues si bien,: por una parte, afirma que esos documentos,
frente a los datos y consideraciones que componen la urdimbre de su libro
pasan a un segundo t?rmino como materia de comprobaci?n (Col?n Espa?ol, Ma
drid, 1914, p?g. 147), escribe, a rengl?n seguido, que los tales documentos han
motivado una nueva teor?a coloniana (p?g. 148). Esto sin contar que lo que no
hay de general, vago y novelesco (*) en aquello que nuestro autor apellide datos
? y consideraciones, es decir, lo colonianoespa?ol de su libro, todo est? nutrido de
la opulenta mesa de los Documentos Pontevedreses, o de los as? llamados; m?s
aun; todo est? compuesto en connivencia. con ellos (**). Los continuadores de
Garc?a de la Riega tienen tambi?n ?l?stima fuera! la preocupaci?n de que en
los Documentos Pontevedreses est? la clave de la ' construcci?n coloniana que
ellos apuntalan actualmente con tes?n digno de mejor causa. Y es que en la His
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(e) Como ejemplo de datos y consideraciones generales, puede verse el Cap. I, que tanto toca a Es .
paga como a Francia, los Caps. II y III (donde se comentan la afirmaci?n del descubridor de Am?rica de ?
haber nacido en G?nova, en el sentido tan pueril de que es un adorno her?ldico, y la cl?usula hereditaria de la
escritura de fundaci?n del Mayorazgo hecha por aqu?l en 1498, seg?n la cual ninguna mujer pod?a heredarlo
.salvo si aqu? ni en otro cabo del mundo no se hallase hombre de mi linaje verdadero, dice, que se hobiese 11a
' mado y llamase ?l y sus antecesores de Col?n*, en el sentido de que la frase otro .cabo del mundo, parece alu
dir a la costa gallega con su promontorio Finisterre, como si en la lengua castellana del siglo xv esa frase no
significara cualquier punto de la tierra, interior lo mismo que mar?timo, y corno si no hubiera en el occidente ?
? de Europa otros dos cabos denominados Finisterre y Endland), son de una vaguedad absoluta, a no ser en
los casos en que se ponen a la luz de los documentos hallados en Pontevedra (p?g. rr); y enteramente il?gicas
y fant?sticas sus conclusiones. No es menos fant?stica la velada conclusi?n del Cap. IV de que Col?n es espa?ol,
a parte de lo infantil de la prueba sacada de los indicios ling??sticos de los escritos de Col?n, que supone un to
tal desconocimiento de los idiomas gallego y castellano de la segunda mitad del siglo xy. La ex?gesis de que
hace gala en los Caps. V, VI, VII y VIII, que giran en torno al tema del IV, es perfectamente acomodaticia y
? amagada a su intento, siempre frustrado, de negar la patria genovesa de Col?n, y perfectamente ayuna de esur
dios b?sicos filol?gicos; eso sin contar con que el Cap. VIII viene iluminado por los Documentos Pontevedrhes
colonianos, y que en ?l se desliza la novelesca idea de la emigraci?n a Italia, desde Pontevedra, de los padres
de Col?n, y se afirma como cosa sencill?sima el hecho de que en ese tiempo la voz Fonterosa (que aqu? aparece
por generaci?n espont?nea) haya cambiado en Fontanarossa, d?ndose as? por supuesto, lo que es fundamental?
simo en el libro Col?n Espa?ol, a saber, que Fonterosa, gallego, es el apellido de la madre de Col?n, Susana, y
.
italianos del siglo xv referentes?contin?a?a una ap?crifa madre de Col?n. Los Caps. IX y X dependen, por
completo, de los Doc. Pont, colanianos. El Cap. XI es otra divagaci?n sin inter?s, sobre la edad de Col?n. El
' XII, sobre los nombres impuestos por 'Col?n en las Antillas, relacionado asimismo con los Doc. Pont, colonianos,
? ha sido criticado justamente por el doct?simo Sr. Sampedro, como falto de toda base. El XIII estudia o cita
todos los Doc. reputados por nuestro autor como Pont. colonianos. Y el XIV, ?ltimo, es una p?gina de leyenda,
("') V?anse los Cap?tulos de Col?n Espa?ol: elf, El verdadero linaje de Col?n., .IX, El apellido Co
l?n., y ?X, Los hebreos Fonterosa. Domingo de Col?n, el Mozo., y tambi?n el .11I, Las dos familias de Co
S3 l?n y su hijo el historiador., el ?VIII, Documentos italianos?, y el ?XII, Nombres impuestos por Col?n en las
Antillas..
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