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BOLETiN DE LA REAL ACADEMIA GALLEGA 151
SECCI?N OFICIAL
El Ayuntamiento de La Coru?a, rindiendo homenaje de admiraci?n
al que fu? esclarecido cronista oficial de la ciudady docto archivero
bibliotecario de nuestra Academia, don C?sar Vaamonde Lores, envi?
al Presidente de la misma la sentida comunicaci?n (que nos honramos ?
, en Itranscr,ibir
?La Corporaci?n municipal, con cuya Presidencia me honro, se ha
enterado, con profundo sentimiento, del fallecimiento de don C?sar
Vaamonde Lores, erudito acad?mico, cult?simo cronista de la ciudad y
persona lque gozaba en Galicia y fuera de ella de s?lido prestigio, por
sus konocimientos, por sus actividades acad?micas, por su especialidad
de historiador y por sus ' estudios en estas materias, que le hab?an
acreditado tomo figura preeminente en orden a investigaciones que a
la !histori? de la regi?n ata??an.
La 'p?rdida del se?or Vaamonde Lores no queda circunscrita a la
Real 'Academia Gallega, sino que alcanza a cuantos elementos con
, tribuyen icon su labor a dar lustre y prestancia a nuestra querida Gali
cia,pedazo de Espa?a que sabe sentir a ?sta hondamente.
Al transmitir este acuerdo a V. S., como Presidente de la Real ' ?
Academia Gallega, le ruego que se sirva expresar a las hermanas del
finado ala condolencia del Ayuntamiento, que recoge en ello el sentir
de ,La Coru?a, signific?ndoles que el Concejo coru??s sabe apreciar
debidamente la p?rdida que la muerte del Sr. Vaamonde representa
para toda Galicia.
Y, al propio tiempo, le comunico que el Ayuntamiento ha acorda
do,!rindiendo culto a la memoria del finado, conceder a las hermanas
del !mismo, do?a Luisa y do?a Emilia, un socorro de dos mil quinien
tas pesetas, que sirva para aliviar la precaria situaci?n econ?mica en
que han . quedado.
Si la cuant?a no responde a los m?ritos del Sr. Vaamonde, por ra
zones ajenas a la voluntad de todas los que componen el Concejo, cons
te a ustedes, es decir, a la Real Academia Gallega y a las hermanas
del que fu? ilustr?e cronista de la ciudad, que los sentimientos que han
inspirado ese acuerdo son adecuados a lo que exige, como imperativo