BOLETIN
DE L.A.
REAL ACADEMIA GALLEGA
A?o XX Coru?a, 1.? Septiembre 1925 N?m. 175
DE RE EPIGRAPHICA ?
Al Museo de Santiago vino en 1909, con motivo de la Exposici?n
que se celebr? aquel Ai?o Santo, una l?pida romana con su correspon
diente ep?grafe que permanece, seg?n pienso, todav?a in?dito y merece
ser conocida. Tiene ella y sus letras la figura que representa el adjunto
fotograbado y las dos, piedra y letras, demuestran que no es obra de
los tiempos en que estaban en auge las artes romanas, pues ni las l?neas
de la piedra presentan un tipo bello, ni las letras descuellan por su her
mosura, aunque tampoco pueden decirse tan malas y deformadas como
otras que en el mismo Museo y en otros se guardan. Pero mejor que
por mis explicaciones, la conocer?n mis lectores por la adjunta imagen.
Las AA se hacen notar porque en vez de la l?nea horizontal que las
atraviesa, presentan todas ellas en en lugar un punto, ejemplo que no
he visto en ninguna de nuestras inscripciones ni cristianas ni paganas,
ni trae de ella ningun caso Hubner, ni en sus Inscriptiones Christiance,
ni en sus Exempla inscriptionis epigr?phicce, ni tampoco Cagnat en su
Cour d' epigraphie latine. Con todo, a m? se me figura haber visto algu
no que no recuerdo y quiz? haya sido en la misma piedra que ahora
examino. Las EE y las LL llaman tambi?n la atenci?n por la peque
,?ez de sue trazados horizontales y porque su otra l?nea, en vez de ser
recta y vertical, afecta una cierta curva. Nada hall? a ellas semejante
en los Exempla inscriptionis epigr?phicw, de H?bner, que dejo citados
ya. No pu ede dudarse, a mi entender, que sea esta l?pida de ?poca ya
muy d ecadente. Las deficiencies de la mano de obra, y lo abiertas que
se presentan sus AA parecen demostrarlo, pues aunque las inscripcio
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