88 ?oletin de la t eal /lcademia Gallega
?Argos Divina?; pero, ; en definitiva, d? una manera indubitable :nada
sabemos. La Academia patrocina el color azul para campo del escudo y a
ello, por de pronto, debemos atenernos.
Cosa parecida ocurre con la bandera gallega. No falta quien diga
que la bandera debe ser blanca, como blanca era la que llev?'a campa?a
el Batall?n Literario de Santiago, y del mismo color, s?mbolo de pureza,
era tambi?n la que, seg?n la tradici?n, tremolaba el Ap?stol en la legen
daria batalla de Clavijo. Otros hicieron surgir el color azul en l?nea
transversal, sobre blanco, que se adopt?, conforme al modelo, para el
estandarte del Centro; y sin embargo, Eduardo Pondal, el bardo glorioso.
de ?Os Eoas? entend?a que la bandera gallega debiera ser toda blanca,
diagonalmente atravesada por la cruz roja, esto es, por el alfanje simb?
lico del. Hijo del Trueno.
Ya veis cu?n necesaria es a Galicia la acci?n de la Real Academia y
cu?nto. a su labor cultural puede y debe significarnos el concurso de los
nuevos Acad?micos. Agrup?monos, pues, a su lado: unos con ?su' propa
ganda e iniciativas; otros reforzanzo las Listas de inscriptos en la Asocia
ci?n Protectora; todos, con la m?s decidida voluntad y la mayor devoci?n
por el lema santo: Todo por y para la cultura de Galicia.
Y'de este modo, unidos todos, constituyendo 'todos un bloque irre
'ductible e inexpugnable de voluntades gallegas, acaso un' d?a podamos
decir,'con m?s justicia que Pettofi al referirse a Hungr?a, que si la Tierra
es la corona de Dios, su m?s hermoso joyel es Galicia.'
Bien venidos se?is, se?ores Acad?micos. ?Que Dios y la Patria os
inspiren y os alienten!
DISCURSO DEL P. JUAN RODR?GUEZ CABRERA
Se?ores de la Asociaci?n Iniciadora y Protectora de la Real Academia
Gallega
Distinguido auditorio:
Al contestar yo a la comunicaci?n en que la Real Academia Gallega
me anunciaba la elecci?n que hab?a hecho de mi humilde persona para
su socio Correspondiente, escrib?a estas palabras: ?Si el intenso amor a Ga
licia diera derecho a ingresar en la Real Academia Gallega, seguro estoy de
que pocos ser?an m?s acreedores queso a semejante distinci?n; pero como
esto evidentemente no basta, y, al mismo tiempo carezco de otros t?tulos,
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