CABANILLAS :ENJUICIADO POR SI: M.ISMO
Ilace ya varios, bistros que, por gentileza de persona amiga,
soy poseedor de in?s de sesenta cart?s y diversas poes?as que,
d?rante su estancia en la isla . de Cuba, hab?a escrito Cabanillas
a sus amigos de Cambados.
Confieso que cu?ndo me hice cargo de ellas, sent? en mi in
terior un extra?o orgullo y ego?smo, propios del que encuentra
un tesoro, con el que se puede especular. Mas hoy, al conside
rar que la mano que las escribi? y quela mente que las inspir?
son va polvo en el viejo y nost?lgico cementerio de Fefi?anes,
no siento egoism() ni ?rgullo sino una emoci?n reverencial, un
santo respeto a la uiemoria del q?e, ausente entonces del te
rru?o amado, escribi? aquellas poes?as y aquellas cartas con
fidenciales'llenas de imperecederos r?cuerdos e impregnadas de
una infinita y vital saudade c?smica hacia la villa que le viera
nacer y deambular ,por sus calles y rincones, con la sonrisa en
los labios y con ansias de horizontes sin nubes en su mirada
lejana y m?sticamente so?adora.
Aquellas cartas, adem?s, vinieron a mis manos cuando yo
hab?a ya escrito algunos de mis trabajos fundamentales sobre
Carnbados y me dispon?a a publicar. otras monograf?as, que ha
h?an de ser ponderadas y elogiadas por don Ram?n, con frases
de afecto para mi persona y de nostalgias vivenciales para el
trozo geogr?fico en donde ambos limos abierto los ojos a la
vida, precisamente en la misma calla de Novedades de la villa
de Fefi?anes, unida desde fines del siglo pasado a la actual de
Cambados.
el estudio amplio y comentado de estas cartas, digamos boy que
ellas constituyen la major fuente informativa no s?lo para tra
zar el perfil biogr?ficomoral del poeta cambad?s, sino tambi?n
para conocer sus primeros pasos por los senderos de la Poes?a,
