olel?n de la Real 5cademia 6allega 1o7
?Era de esperarse. La fiesta de anoche en el Nacional, en homenaje
? Curros Enr?quez y ? beneficio de los fondos de la Real Academia
Gallega, culmin? en ?xito grandioso, inenarrable, capaz de enorgullecer
? un pueblo que, como el de Galicia en Cuba, registra en su cuadro
sincr?nico fechas memorables por el enaltecimiento regional y la exal
taci?n de sus glorias.
?El teatro completamente lleno; en los palcos lo m?s selecto y dis
tinguido de la colonia, las asociaciones gallegas todas, altas representa
ciones de las colectividades hermanas, banderas, cortinas, fibres, enla
zando en trinidad grandiosa.las ense?as y atributos de Cuba, Espa?a y
Galicia.
?Era una fiesta de Patria, de cultura, de veneraci?n al genio, de
conjuncion de afectos; y de ah? su brillantez, su grandeza, su expresion
tipica, regional, rememorando figuras hist?ricas, . triunfos literarios
dulzuras del idioma, melod?as de la hermosa y encantadora Galicia,
tanto m?s amada cuanto m?s lejos la contemplan los proscritos, los que
en ella vieron la luz, los que por ella luchan y se afanan manteniendo
constantemente encendida en el pebetero del arnor la llama sagrada de
sus reivindicaciones y derechos.
?En el escenario el busto de Curros, sobre hermoso pedestal que
cruzaban, cinceladas on m?rmol, las palmas del triunfo. Los nobles
rasgos de aquella gran figura, estaban perfectamente delineados: Ma
nuel Pascual, el estudioso y aventajado cuanto modesto escultor, hab?a
puesto en su obra toda su inspiraci?n y su genio art?stico. Los aplausos
fueron atronadores al correrse la tela: era la ovaci?n al bardo inolvida
ble ?d'a Virxen d'o Cristal?, al poeta en?rgico y vibrante de ?La
Guerra civil?, al escritor incorruptible y perseverante en sus luchas
diarias por la redenci?n y la libertad de los pueblos, que tantas veces
con su pluma enalteci?, con galanuras de estilo, las columnas del Dia
rio de la Marina, de que era redactor insustituible y por todos venerado.
?Y subi? ? la tribuna Angel Barros, un privilegiado de la elocuen
'' cia,.un taumaturgo de la oratoria que con frase culta y hermosa sabe
herir el sentimiento de las masas, recogiendo sus inspiraciones y hala
gando, sin vanos efectismos, sus afectos m?s puros y m?s hondos.
?Imposible ? poco menos en estos instantes recoger con precisi?n
su herrnoso discurso. En brillante apologia de la Real Academia Ga
ilega explic? que la docta corporaci?n era ajena ? toda idea pol?tica y
religiosa sin m?s car?cter que el de dar unidad al idioma gallego por
medio de una Gram?tica y un Diccionario; estudiar nuestras ciencias,
cultivar la literatura y las artes inclusas las industriales; recoger nues