olet?n. de la Real: Y4cademia Gallega 245
que ?arruina toda otra Pescay s?lo aprovecha ? los pocos armadores
que las usan para beneficio de los extra?os y no de la Provincia, que
con pocos pescados est? servida, y por tanto es contra ellos? (1) ;y aun
cuando se reconoce que el jeito ?estropea la sardina que se recoge con
?l enmall?ndola, y as? .la lastima y no sirve para el comercio; y que
aballando ? alborotando el mar ? golpes se ausenta el pez y asustado
no repite la venida? se autoriza su empleo limit?ndolo ;? 150 mallas y
recomendando que. no se valee ni golpee en manera alguna, el mar.
Los sencillos pescadores gallegos no comprend?an m?s y se dieron
por satisfechos con la resoluci?n; pero el negocio sigui? en manos ca
talanas y no echaban de ver que estas diferencias de unos y otros re
dundabansiempre en su perjuicio, pues aislados, sin asociarse entre si
como hicieron m?s adelante, entre dos fuerzas que lo solicitaban, lejos
de permanecer neutrales ? inclinarse al lado m?s conveniente para ellos,
hac?an causa com?n con sus explotadores de antiguo (2).
x.==
Equivoc?ronse los que cre?an que, prohibida la j?bega, la concu
rrencia de los catalanes desaparecer?a.. Estos siguieron y lograron, uti
(1) No fu? Bin? ? costa de m?ltiples y continuados trabajos c?mo se di? soluci?n '?
este Costos?simo pleito de los Mares de Galicia: ya en 14 de Enero de 1777 se resolviera en
favor de los gallegos; pero tenaces los catalanes volvieron ? la carga y, en Agosto de 1785,
se mand? observar lo determinado en 1772 que hab?a consagrado la libertad de la Pesca,
contrastando la parsimonia de las resoluciones favorables ? los gallegos con la rapidez en
las que ata??an ? los catalanes.
Protestaron contra la de 1787 los catalanes, pero vino confirmada por la de x788.
Quien desee m?s datos consulte SAMPEDRO, Obra cit? p?g, 688 y siguientes.
(2) A redimirlos tend?a con su proyecto de. Montep?o, Comide, .Como.. veremos, sus
generosos esfuerzos nada pudieron contra la general apat?a.
Mientras los humildes permanezcan sin solidaridad entre s?, f?cilmente ser?n explota
dos. A los industriales establecidos en Galicia no les conven?a que viniesen otros, no s?lo ?
hacerles la concurrencia, sino ? ense?ar ? los pobres que, uni?ndose, podr?an mejorar su
suerte. El caso de los catalanes que llegaban sin capitales y, por la uni?n entre s?, presto se
enriquec?an, les hac?a ver que su reinado pronto concluir?a si ten?an imitadores en el pa?s.
Les conven?a ser ellos solos, adelantarles ? los infelices pescadores cantidades, convenir con
ellos un precio dado de antemano y que despu?s la pesca fuera escasa. Ellos hac?an su ne
gocio as?, ganando por el subido valor de la pesca que ten?an ellos comprada ? bajos pre
' cios. En sus quejas achacaban ? los forasteros, lo que ellos hac?an. Olvidaban?y esto hay
que tenerlo presente?que los catalanes eran ? la vez pescadores y salazoneros y que, ?
quienes principalmente ten?a cuenta que los pescadores fuesen solo pescaderos, era ? los
que ?nicamente se dedicaban ? la salaz?n.