Doletfn de la Real ylcademia Gallega 293
cir y comentar al historiador de los godos, San Isidoro; ni hubo poeta
ni escritor que se remoritara m?s alto en alas de la elocuencia, impul
sado del amor por las cosas de Galicia, al cantar el heroismo galaico
en la guerra de la independeneia, y parangonar la ?pica defensa de
Astorga contra las huestes napole?nicas, con la reconquista de Vigo,
envolviendo en un solo y mismo gesto de admiraci?n al bravo Santo
cildes y a los h?roes del Provincial de Santiago, de quienes dijo Junot
que eran dos m?s hermosos soldados que viera en su vida?.
Por eso es nuestro D. Marcelo Macias, y al declararlo hijo adop
tivo de Galicia no hace su madre m?s que pagarle amor con amor. El
mismo D. Marcelo lo dec?a en su discurso de gracias, pronunciado en
el banquete que hubo de celebrarse con motivo del homenaje de Oren
se. ?S?lo de una cosa me glorio ?dec?a el insigne homenajeado? y
tengo para m? que, por mucho que se la encarezca, no se llegar? a
dar en la exageraci?n y en la hip?rbole, y es de mi amor a Galicia.
M?s de una vez, a Bolas conmigo mismo, me he preguntado pensativo:
?de d?nde nace este amor tierno, fervoroso, entusiasta que siento aqu?,
en lo Inds hondo del alma, hacia Galicia? ?O?mo es que tiene para m?
los irresistibles encantos de la ninfa Calipso y la seductora hermosura
de la reina Dido? ?Por qu?, a diferencia del sagaz Ulises, del piadoso
Eneas, no me decido a romper los lazos que tan dulcemente me apri
sionan? ?Qu? voz interior es esta que me dice: no huyas de sus brazos,
cons?grate a su amor y a su servicio: cifra en ella la felicidad: shic
felicitas??
As? se entreg? a Galicia D. Marcelo Macias. As? honr?, vener?,
ensalz? y glorific? a su madre de adopci?n. ?Qu? hacemos nosotros
m?s que retribuirle en amor lo que en amor nos di?? Todo el caudal
de sabidur?a que atesor? en su larga y fecunda vida de trabajo, nos
fu? ?ntegramente donado por ?l sin reservarse ni un ?bolo.
Sobrepujando generosamente a los multimillonarios yanquis que
distribuyen en vida sus cuantiosos bienes en obras de cultura, D. Mar
celo di? a Galicia mucho m?s: nos di?, am?n de los tesoros de su alma,
su alma misma. Y ?mulo de Massill?n en la oratoria sagrada: rival de
Bossuet, en erudici?n cient?fica, ya que as? como ?ste enalteci? a nues
tro Paulo Orosio en su c?lebre :Discurso sobre la Historia Universal.,
el se?or Macias exalt? a an vez la figura de Idacio al traducir y comen
tar su Cronic?n famoso, fraternal compaf?ero en investigaci?n hist?rica
de su amigo entra?able y conterr?neo el inolvidable glosador de la
Cr?nica Troyana, D. Andr?s Martinez Salazar; epigrafista em?rito; hu
manista consumado; literato pulcro y galano; critico y erudito de sin