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joletfn de la Real Academia Gallega 47
all? hab?a. La torre del homenaje ten?a cuatro pisos abovedados; las
otras, uno. En torno de este muro interior habia otros dos muros ex
teriores, conc?ntricos unos a otros. En ellos hab?a sus cubos y barba
canas, puertas, conpuertas y baluartes. Ten?a, como todas las fortale
zas, puertas elevadoras, y del interior part?a una mina que comunicaba ?
con el r?o, teniendo adem?s puente interior. Adem?s ten?a casa para
vivir el Patriarca, o mejor dicho, el arzobispo, casas para alcaides y
merinos, caballerizas con cabida para unos doscientos caballos, depen
dencias para doscientos hombres y dependencia para muchos pertre
chos y municiones. El espesor de las paredes lo manifiesta un testigo
diciendo que en el hueco de una ventana cab?an diez hombres. Las
torres y las cercas eran todas almenadas as? coma la casa. La capilla
estaba en la parte baja de la torre de Santa Eufemia.
Los testigos que hablan de este asunto, entre ellos Garcia Gonzalo ?
Vaamonde, cl?rigo de Santiago de Codero, dicen que era necesaria
para la defensa de Santiago, pues por all? ven?an las gentes de Ponte
vedra, Padr?n y Portugal, Noya, Muros y Finisterre. En frente ten?a
la torre de Altamira, que se hiciera, cuentan, cuando la Rocha estuvo
ca?da desde la guerra hermandina. Cuando esta fortaleza fu? en esta
ocasi?n derribada era alcalde de ella Alvaro S?nchez de Vila. En
tiempo de . D. Rodrigo hab?a desempe?ado este oficio Alvaro de
Rocha (1).
Con . los datos que los testigos suministran podr?a f?cilmente
recomponerse esta hist?rica fortaleza, testigo de tantas historias, de
g?nero tan distinto, que no es del caso referir aqu?. Muchas de ellas
1 as conocen nuestros lectores por correr en muchas obras, que pode
mos llamar cl?sicas para los dados a estos estudios.
Fortaleza de Oeste.
Esta fortaleza que en su origen ven?a de la dominaci?n romana y
ha desempe?ado un papel tan importante en la defensa de nuestro terri
torio, contra normandos; piratas de toda clase e ingleses, constaba de
siete torres unidas por barbacana. Una torre se llamaba de Lugo, hacia
tierra, que era la del homenaje, con su puente elevadizo, puerta y com
puerta; y otra tambi?n del homenaje hacia el mar, y tanto en una como
'en otra hab?a su guarda y alcaide. Las otras cinco, afectando forma m?s
`1 o menos circular el conjunto, en torno de ambas, unidas como arriba
(t) Proc. Fol. 7386.885