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134 jole tin de la Real %Icademia Gallega
del ?Casino Espa?ol? y del Comit? Ejecutivo de las Colonias Espa?olas
Confederadas de Cuba. Su presencia en la tribuna ac?gela el p?blico con
un?nimes y estruendosas aclamaciones. Es una ovaci?n merecida ? quien
como ?l, sirviendo constantemente ? Espa?a, ? Galicia y ? Cuba, por sus
grandes talentos, por sus fecundas iniciativas, por su ilustraci?n, por su
altruismo y por su cultura, ha logrado alcanzar un encumbramiento social
que s?lo ? los escogidos est? reservado.
?Su discurso, elocuent?simo como suyo, matizado casi siempre de
arranques tribunicios salmeronianos, produjo aclamaciones incesantes.
Haciendo elogio de la Real Academia, enalteciendo ? Pastor D?az, abo
? gando por la solidaridad hispanocubana y excitando ? la Galicia de Cuba
? desterrar diferencias y agruparse constantemente, en aras de la uni?n,
bajo la ense?a de la Patria, el orador estuvo inspirad?simo y las aclama
ciones y v?tores sesuced?an interminables. Pero no empeque?ezcamos la
labor del tribuno. Su discurso, ?ntegro, honrar? las columnas del Diario
de la Marina (t). Ba?os, accediendo ? nuestros ruegos, reconstruir? su
oraci?n de ayer noche, y nuestros lectores podr?n saborear entonces las
bellezas de estilo, la grandeza de fondo y el esp?ritu de justicia, de pa
triotismo y de enaltecimientos de raza, que encierra su discurso.
?Ley? despu?s, magistralmente, otro privilegiado de la oratoria, el
Acad?mico Sr. Fuente, el trabajo literario del Sr. Aramburu, que inser
tamos despu?s de estas l?neas (2), satisfaciendo anhelos de cuantos anoche
aclamaban ? Aramburu, el ilustre escritor guanajayense, m?s admirado
y m?s querido cada d?a. Tambi?n Aramburu es Acad?mico de la Real
Gallega; y este honor merecid?simo, ? ?l como ? Fuente dispensado,
cubanos ambos, ambos, por el afecto, hijos esclarecidos de Galicia, de
votos de la raza y panegiristas de su gloria, llenaba de orgullo ? los ga
llegos, ? los espa?oles que en el Nacional se congregaron ayer y ? los
cubanos que con nosotros compart?an los homenajes tributados ? Pastor
D?az. Y es que son pocas, como la de Aramburu, las almas grandes, de
coraz?n generoso, de patriotismo sano, primates del saber, al servicio de
lo justo, de lo honrado y de lo noble.
?Sigui? despu?s la parte musical, dirigida por el maestro Tom?s. La
banda municipal en la Sonata Gallega, de Montes, y en el mosaico Cuba
Galicia, de Tom?s, estuvo inimitable; aplaud?d?s?ma y revelando notables
condiciones como soprano, la se?ora Ana Aguado de Tom?s, en la esce
na y aria de la ?pera Rienzi y en las canciones gallegas B?goas e Sonos,
(c) Se inserta en el presente n?mero del Bolet?n.
(2) Idem.
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