284 IDolel?n de la Real %lcademia Gallega
de M?rito, D. S?verino T. Solloso, D. Jesus Peyn? y D. Gabriel Y??ez;
y Socio Benefactor, D. Ram?n Armada Sagrera.
Nuestra cordial enhorabuena y afectuoso saludo ? todos los
elegidos.
ANTOLfN LOPEZ PELAEZ
Invitado por esta Real Academia, para dar una conferencia litera
ria, nuestro ilustre y querido compa?ero Ilmo. Sr. Dr. D. Antol?n L6pez
Pelaez, Obispo de Jaca, accedi? deferente ? nuestros ruegos, y ha sido
por breves d?as hu?sped de la capital de Galicia, que tuvo para tan
insigne prelado'y defe?sor y propagandista incansable de las glorias de
Galicia, todos aquellos entusiasmos y afectos de las almas nobles y
agradecidas.
D?bil tributo de la admiraci?n que los gallegos sienten por el emi
nente escritor, ha sido la brillante recepci?n del Sr. L?pez Pelaez, ? s?
llegada ? la Coruna el 12 del corriente, donde fu? recibido y saludado
por las autoridades civiles y militares, por sus compafieros de Acade
mia, por todo lo Inds distinguido de la intelectualidad coru?esa, perio
distas, artistas, escritores y por todos cuantos sienten en su alma el no
ble sentimiento de la gratitud, hacia quien, honrando ? Galicia sin ser
su patria, se honra ? si rnisrno.
El banquete ofrecido el d?a 14 por todos sus compa?eros de Aca
demia, amigos y admiradores, acto fraternal al que asistieron, 0 se ad
hirieron, Acad?micos de las cuatro provincias hermanas, representantes
de las ciudades incense y orensana, todo cuanto vale y significa en la
regi?n, la colonia astorgana coru?esa, la prensa regional y gran n?mero
de personalidades y periodistas ilustres de la provincia leonesa y de
otras partes, fu? sencillo y severo, y en 611a fraternidad y afecto entre
los que conviven en la rep?blica de las letras y las artes, se patentizaron
hacia el ilustre obsequiado.
La velada literaria celebrada, la noche del mismo d?a 14, en el her
moso sal?n de fiestas de la veterana Reuni?n de Artesanos, que galan
temente fu? cedido para este objeto, ha superado ? todo cuanto sus or
ganizadores esperaban de tan importante acto.
El sal?n, lleno de escogida y selecta concurrencia. En el escenario,
el ilustre prelado, en uni?n de sus compa?eros de Academia. La ex
pectaci?n, inmensa. Comienza el acto con la lectura de numerosas 0