Estudios e investigacións sobre o P. Sarmiento
BOLETÍN DA REAL ACADEMIA GALEGA
Non ten o menor reparo en confesarllo ó Padre Rábago: ?Tampoco había pensado en averiguar el origen de las voces gallegas hasta el año de 45, cuando, por una tal cual inclinación anterior a conjeturar sobre la etimología de algunas voces castellanas, la extendí sin particular estudio a penetrar el origen de las voces gallegas conforme las iba oyendo en Galicia?. Vemos, xa que logo, a Sarmiento primeiro inmerso no ambiente galego e, despois de 1745, volve somerxerse nel, pero ¿qué sucede entre ambos períodos? ¿Como recibiu Sarmiento o impacto da Corte e o corte que desde o ano 1710 o separa radicalmente da súa primeira lingua? ¿Cómo recibiron a Sarmiento os irmáns da Orde do convento de San Martín? ¿Qué impresión causaría nun medio castelán aquel rapaz de 15 anos? Algo podemos rastrexar do que foi a súa historia lingüística castelá desde o ano 1710. Alá aparece recordado corenta e dous anos despois, cando a finais de maio de 1758, está escribindo no seu Onomástico, un episodio lingüístico que é moi revelador: ?es verdad ?recorda que los gallegos rústicos no entran bien en algunas pronunciaciones moriscas que hay en la lengua castellana, porque, siendo la lengua gallega labial, no se acomoda el gallego a abrir un palmo de boca y a sacar un palmo de lengua para pronunciar las letras guturales que han quedado de los moros. Tampoco las tres naciones dichas pueden entrar en esas pronunciaciones africanas. Y, con todo, ninguno se ríe de ellos: esa risa está reservada contra los gallegos. Bien es verdad que los gallegos ?segue a decir o benedictino se podrán reír también de los castellanos porque no aciertan con la pronunciación gallega, la misma que es común a italianos, franceses, catalanes, asturianos y portugueses, en especial en las letras GE, GI, jota y X. A un castellano que chasqueaba a un gallego porque no pronunciaba ?Gerónymo? a lo moruno, sino ?Guerónymo? a la griega, y a la latina, le dije yo que pronunciase a la gallega estas voces, que yo pronuncié antes, ?Jorge?, ?axenxos?, ?San Xenxo?, ?Alxóuxeres?, ?desejo?. ?agergillar?, etc., y todos se rieron de su ineptitud para pronunciarlas. Hace ya cuarenta y dos años que a otro que quiso reírse de mí, porque su hábito era reírse de todos los gallegos, a causa de la GE, GI, le dejé con un palmo de su boca abierta, probándole que no él sino los gallegos pronunciaban mejor la GE, GI, y le cité el Arte de Nebrija. También soltó su ignorante risa al oír cita semejante. Púsele el Arte en la mano y le di registrado aquel pasaje en que Nebrija dice que la pronunciación de los castellanos en las sílabas CE, CI y GE, GI es una corrupción, pues se deben pronunciar uniformemente como si fuese con K, v. g. KA, KE, KI, KO, KU; y la G como si tuviese U licuescente: GA, GUE, GUI, GO, GU?, (Onomástico, 118119). Este episodio parece ilustrar que por 1716, seis anos despois da súa saída de Galicia, aínda Fr. Martín non lograra impoñerse na articulación do iota, e incorría en substitucións coma as de Guerónimo ou de págaras que xa temos visto. É moi probable que tampouco abandonase o seu propio acento, xa que adoita facer alusións ás burlas e risas que ocasiona: ?El acento y tonillo de los gallegos ha cargado con
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