$oletin di la Real Academia Gallega 89
Unido, por lo .menos desde eritonces, a la familia de San Ri
sendo, volvemos a saber de ?l con motivo de aquella famosa reuni?n
c?lebrada en Lugo en el .af o 927, promovida por el referido conde
Gutierre Men?ndez para la reforma del monasterio de Ribalogio
(que su madre D.g Ermesenda fundara), en vista de ,los esc?nda
los que, olvid?ndose .de la disciplina, produjeron los monies y
monjas que lo poblaban; reuni?n a la que asisti?, ' entre otros
abades, San Franquila, de cuyo monasterio de Ribas de Sil, llev?se,
entre otms, al monje Busiano, que se puso por abad de 1os'que de
nuevo poblaron el monasterio de Ribalogio (1).
Y al` fundar San Rosendo e1 de Celanova, por el an"o 937 (2),
puso por primer abad de este famoso monasterio a San Franquila,
y de sus virtudes son 'prueba elocuente lo que el monje Ordo?o,
bi?grafo de San Rosendo hacia'el affo` 1180, nos dice de cierto mi
lagro que los PP. Yepes y in Cueva,'recogen (3), asi como los que
aun despu?s de muerto se le atribuyen (4),'`raz?n per la cual nos
(1) Quedan hoy los restos, en parte moz?rabes, de,;este' antiguo
monasterio en la capilla de Santa Maria de Loyo, cerca de Puertomar?n.
El acta de la reuni?n o concilio de Lugo fu? publicada por el P. FL?REZ
en el tomo XVIII de su Espa?a Sagrada, ap?ndice, p?gina 321.
(2) No consta, en absoluto, el alto de la fundaci?n, pero en el 936,
Froila, herm?no de San Rosendo, don? la villa donde hab?a de estable
c?rse el monasterio;` y en e1 938, San Rosendo y su madre Santa 'Ilduara
enriquecieron ya la nueva casa de Celanova; por eso indicamos conic)
m?s probable para la fundaci?n el alto 937.
(3) De dicha interesante' biograf?a parece que existe un c?dice en
la Biblioteca Municipal de Oporto, seg?n nota de nuestro finado compa
f?ero de Academia Sr. OVIEDO ARCE, que recoge el Sr. G?MEZ MORENO en
sus Iglesias Moz?rabes. El P. LA CUEVA traduce as?, de ella, las palabras
de este milagro: ?E dende a pocos d?as, estando sentados todos juntos
y el Obispo San Rosendo hablando con el abad Franquila, vi? S. Rosendo
una semejanza de paloma entrar y salir muchas veces per la boca de su
abad, y dfjole: Padre abad, veo salir y entrar por vuestra boca una pa
loma. Respondi? el abad: Yo no se que es y por qu? lo dices. Dijo San
Rosendo : 'Padre. sabed que esta paloma no es otra cosa que un mensa
jero de Dios que os viene a oonvidar para que presto vay?is a su rain ;
el cual dende a pocos d?as, como S. Rosendo se lo hab?a dicho, se fu?
glorioso '.a los Cielos. ?
(4) Recoge y describe, igualmente, el P. LA CUEVA, los que rea
lizaba cierto elicor semejante al aceite que manaba de su sepulcro y sa
naba,todas las ,enfermedades a que se aplicaba? , y cuenta que habiendose
los portugueses, en guerra con el Reino de Galicia, llevado equivocada
mente sus huesos, creyendo que se llevaban los de ?San Rosendo, al darse