592 BOLETIN DE LA REAL ACADEMIA GALLEGA
adormecida desde entonc'es' en un sopor de siglos. Ese influjo,
tradicional alumbra' la cantera po?tica' de los A??n, los Pinto
y los Camino, y culmina, a partir del f?nebre hito' de Aurelio
Aguirre, ? con 'la aparici?n de ' la constelaci?n"de poetas de la Ila
mada segund? generaci?n rom?ntica, constelaci?n formada por
estrellas esenciales de nuestro cielo' po?tico: 'Rosal?a, Pondal y
Curros.
Ese pujante florecimiento literario, al que se s?ma un ansia
general) de restauraci?n hist?rica de la personalidad de Galicia
pat?nte en la obra' de nuestro sabio M?rgu?a.; acusaba la presen
cia de' un instr?mento ling??stico llegad? a' plena 'madurez, do
tado .de incontenible fuerza expansiva. Como nuevo L?zaro, el
idioma gallego ?cuerpo para el esp?rit? de su pueblo`hab??
res?citado y echado a andar, y nec?sitaba un hogar al que aco
gerse y donde encontrar calor para seguir caminando. Ese hogar
no podia ser otro que el formado por aquellos 'escritores` que ye
Man entregados al cultivo de las tetras regionales y a infundir
nuevos alientos al alma de Galicia. Hogar hasta entonces ,dise
minado por los ?mbitos' del pals en diversos ce??culos provin
ciales en los que germinaba la semilla de la Corporaci?n acad?
mica gallega. As? oc?rr?a con la tertulia de la "Librer?? Regio
nut , en el Riego de Agua de LA CORU?A, animada por el me
rit?simo historiador de nuestra literatura Carr? Aldao y nutrida
con la asistencia de ilustres fig?ras de nuestras tetras como Mur
gu?a Pondal, Martinez Salazar, ` Salvador Golpe, L?gr?s Freire,
Rodriguez Gonz?lez, Banet Fontenla y tantos otros de dentro y
fuera de In provincia; asi suced?a con las reuniones en el Museo
Arqueol?gico de ORENSE, presididas poi los Macias, los V?zquez
N??ez y los Fern?ndez Alonso, y en la redacci?n de "El Eco de
Orense", en torno a Lamas Carvajal; y as? acontec?a con las ac
tividades intelectuales, convergentes en los temas' sobre Galicia,
de Varela Lenzan? y Rodriguez L?pez, en LUGO, de Casto Sam
pedro y Said Armesto, en PONTEVEDRA, de Amor Ruibal ' y
Barcia Caballero, en SANTIAGO.
Mas descontada la realidad de este ambiente propicio al n?
cimient.o de un ?rgano pr?pulsor de la cultura hist?rica y l?te
raria de Galicia, la causa pr?xima, el impulso decisivo para la
fundaci?n de la Academia Gallega se debi? al genio creador de
Murgu?a y al entusiasmo tenaz de dos emigrantes ejemplares: