Doletln de la $cademia Gallega 43
tomaron a censo cuatro mil ducados al convento de Santo Do
mingo de Santiago el d?a 11 de Abril del a?o 1667. A?os despu?s
tambi?n se realizaban obras, pues en su testamento de ? fecha 191
de Diciembre de 1686 declara el maestro Antonio Rodriguez Ma
seda, que loo que se le deb?a de obras hechas en el conven;t? de
San Jacinto fuese entregado a su mujer Maria de Jes?s Feij?o (1).
Del siglo xviu cons?rvanse en el archivo del colegio de los
Escolapios de Monforte (libro n?mero 50) las escrituras de
dos fundaciones relacionadas coif el convento de San Jacinto. La ?
primera es de D. Jos? Arias Guiti?n, vecino de dicha villa, qui'en
por su testamento de fecha 6 de Octubre de 1715, dej? sus bienes
al Colegio do la Compafi?a y al Convento de los Dominicos, con
carga este t?ltimo de una misa cantada en el altar mayor el d?a
de la Asunei?n, y seis rezadas, con seis vclas de cera blanca, a
honra de la Sant?sima Virgen.
La segund? de dichas fundaciones d?bese a la condesa de
Lemos D.a Maria Rosa de Castro Portugal Centuri?n y Borja,
que por la el?usula cuarenta y siete de su testamento, otorgado en
Madrid el dia 30 de Marzo de 1759 ante el escribano Juan de la
Cruz Diaz, encomend? al Prior de San Jacinto y al Capell?n mayor
de las Franciscanas el patronato de la dotaci?n de cinco doncellas
hu?rfanas, de sus Estados, con cien ducados cada a?o las cuatro
primeras y setenta la ?ltima, sefalando quince ducados de sueldo ?
a cada uno de los dos patronos o administradores de esta obra
pia. Con fecha 11 de Junio de 1795 hici?ronse cargo el prior Fray
Juan Fernandez y el capell?n D. Jos? Arn?s, del? capital de veinic
mil duc?dos destinado a la obra por los testamentarios de la
condesa, seg?n consta por escritura otorgada el mismo d?a en Ma
drid, de la cual di? f? Juan Felipe P?rez. Por Real orden de fecha
28 de Enero de 1835 fu? aplicado el capital de esta fundaci?n al
Colegio de l? Compa??a de Monforte
El convento de San Jacinto pertenec?a a la categor?a de con
ventos menores, siendo por esta raz?n de una importancia secun
daria, pues no exceder?a por lo regular de diecis?is el n?mero de
religiosos qne sustentaba. Econ?micamente considerado, a juzgar
por las cuotas que se le impon?an en concepto de contribuci?n al
(1) Diccionario de Artistas que florecieron en Galicia duranle lo.s
siglo XVI y XVII, por D. PAuLo pi rEZ COSTANTI, p?gina 479. Santia
go, 1930.