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5 BOLET?N DE LA REAL ACADEMIA .ALLEGA
Y en estos momentos, sobrecogido el ?nimo con honda emoci?n,
venimos a rendir homenaje a la memoria de la figura inolvidable
de don C?sar Vaamonde Lores, insustituible Archivero.Bibliote
cario de nuestro Cuerpo Literario, personalidad se?era en la cultura:
regional, maestro y consejero de cuantos acud?an a su fecundo saber
para cultivar estudios y ense?anzas de exaltaci?n a Galicia. Por'
que don C?sar ? en la Academia don C?sar, como don Manuel y
don Andr?s, sus primeros presidentes ? fu? una verdadera institu
c??n, y don C?sar pod?a ostentar con leg?timo orgullo ese se?orial
tratamiento que le correspond?a por ` su innata caballerosidad.
Proced?a de noble ascendencia, pero ?qu? importan los nombres.
heredados si no se consagran por labor personal, por m?ritos con "
quistados en el diario batallar de una vida de sacrificios y trabajos
?n honor de un generoso ideal?
Y el se?or Vaamonde Lores ten?a como pocos, en la actualidad,
ganada la gratitud de su pueblo.
Para qu? citar sus obras y sus m?ritos? Aparte van incluidos
un ?ndice de sus estudios y una relaci?n de lo que podemos llamar '
lauros obtenidos por sus servicios, porque ?l comprendi? que la vida
es una verdadera milicia activa, y con sus esfuerzos tenaces, mu
chas veces angustiosos, dedic?se desde mozo a laborar sin descanso
por buscar en ,el pasado las ra?ces de las tradiciones de la gloria
de su raza.
Con cuanto entusiasmo nos ofreci? su cooperaci?n al proyecto
que le indicamos de procurarse estimular entre la gente nueva el
af?n por las cosas de Galicia, que es tanto como laborar por el enal
tecimiento de la patria espa?ola, pues, como escribi? un eminente
pensador, de las historia`s particulares se forma la historia de las
naciones, y Galicia ha sido la gran cooperadora de la grandeza ?
de Espa?a.
Contamos con excelentes literatos e inspirados poetas"; pero no
abundan los j?venes dedicados a las tareas de investigaci?n en las
diversas manifestaciones culturales?lengua, arte, arqueolog?a, his
toria?, y hay el temor de que nos veamos privados de continuadores
? de los que fueron y son autorizados maestros en estas disciplinas.
La Universidad compostelana pudiera ofrecer entre su juventud
elementos animosos para la gran obra, de que habl? Murgu?a, el
Patriarca de las Letras gallegas, y hay que pensar en organizar en
sus c?tedras ense?anzas especiales relacionadas con la cultura regio
nal, rica y espl?ndida en su tradici?n.
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