170 o 1 db.' de la Real Ylcademia' Gallega
gua capilla de Santa Tecla y gozar las hermosas perspectivas que de all?
se descubren, subid la carretera que se est? construyendo, y despu?s de
recorrer m?s de la mitad de su altura, hallar?is al lado del camino, al
doblar una de sus numerosas vueltas, los restos de paredes que forma
ban varias casitas, cortadas al construir la carretera, que dieron noticia
del hallazgo. Si despu?s de pararos y examinarlas, segu?s vuestra excur
si?n, llegar?is a un repecho del monte donde mana una fuente reciente
mente all? tra?da, y al pie de ella, un peque?o jard?n, y en sus inmedia
ciones numerosas paredes an?logas a las que hab?ais visto ya, pero que no
est?n cortadas por camino,ni obra alguna, sin? que forman varias peque
?as casas redondas, que se hallan, puede decirse, en el mismo estado en
que las dejaron sus constructores. ?C?mo puede ser esto, dir?n mis lec
tores, despu?s de tanto tiempo, seg?n se dice, y en un sitio conocido y
frecuentado? Pues sucedi? porque las casas y sus paredes estaban llenas
y cubiertas' enteramente de tierra; s?lo se distingu?an, como se advierte, .
las que all? a?n hoy se ven en el estado que las dem?s ten?an, por las
piedras m?s altas de s?s paredes que est?n al nivel del suelo. Si esto no
fuera hubieran desaparecido hace ya muchos a?os: el tiempo y los mu
chachos se hubieran encargado de ello.
Una de las que all? hay tiene de di?metro 3'6o X 2150 metros; de
alto mide su muro un metro y poco m?s en partes. En otra se ve una ?
puerta (i), pues su losa inferior est? al nivel del suelo, que mide
&do X o'4o, de suerte que con dificultad cabe por ella una persona a
gatas, y est?n formados cada uno de sus lados de una sola losa con sus
quicios abajo y arriba y sus batientes en la jamba correspondiente y en
el dintel, y parece que no deb?a ser de hierro el quicial, pues el agujero
en que encajaba es bastante ensanchado. Los di?metros de esta casa tie
nen 4' lo X 4'2o y es de notar en ella una losa que debi? ser hogar o la
base de un horno, pues en ella se ven se?ales manifiestas de haberse he
cho fuego all?, y est? embebida en la pared y casi fuera de la casa, meti
da en la tierra que la rodea. Otra casita, un poco m?s arriba, tiene
4'3o X 4'45 y adosada a ella otra cuadrada de 2 X 4'75, en la cual se
ve tambi?n la piedra del hogar, o sea, una en la cual aparecen se?ales in
dudables de haberse hecho fuego sobre ella, pero como no est? como la
anterior, metida bajo tierra, no tiene como ella aspecto de horno.
Hay all? otras varias, desembarazadas ya de la tierra que las cubr?a
y rodeaba, como hemos dicho, y las conserv? hasta hoy, y otras cubier
(1) El Sr. Calvo la llama ventana y su peque?ez la hace tal, pero el estar a nivel del
suelo me mueve a decirla puerta: la cosa es la misma.
li