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,394 ~ BOLET?N DE LA REAL ACADEMIAa GALLEGA
informa acerca de la desaparecida ermita de San. Guillermo,
la cual estaba situada sobre un montecillo de laderas empiT
nadas, que aun lleva el ?nombre del santo duque de Aquita
ni a, en cuya cumbre se conservan los restos del santuario.
Era' ?ste de reducidas' dimensiones y se apoyaba contra
una roca, naturalmente excavada, cuya oquedad servir?a de
habitaci?n para el ermita?o, La ermita 'estaba perfectamente
orientada y a la cabacera se conservan las dos peque?as
gradas del altar. Entre ?ste y la puerta del Norte existe a?n
un sepulcro antropoide muy 'desgastado, que es "el que cita
Hoyo en: su escrito, y se advierte tambi?n el hueco 'de en
trada a la vivienda del ermita?o (1) . ta tradici?n quiere que
fuera' el propio San Guillermo el primitivo habitante de la .~
peque?a gruta, y el cardenal Hoyo cuenta que al desembar
car pretendi? subir a la ermita una cuba de vino que con=
sigo tra?a, mas habiendo querido ayudarle el demonio, pre
. . tendi? ech?rselo encima y matarlo, de cuya asechanza Dios , . *
Fuese o no el corpulento` duque el primitivo morador de
la ermita "finisterrana, ,lo cierto es que ella existi? y fu? pues
ta bajo 'su advocaci?n, alcanzando 'tal fama 'en, el medievo
que atrajo a s? peregrinos de las m?s apartadas regiones,
corno aquel joven caballero h?ngaro llamado Jorge Griss
phan, de quien habla Hammerich, que despu?s de haber lu
chado' como guerrero en los ' a?os de 1347 a 1350, hizo s?
peregrinaci?n penitencial a Compostela, siguiendo m?s tarde
a Finisterre, en donde se detuvo cinco meses para hacer vida
erem?tica en la iglesia de San Guillermo, pasados los cuales
continu? a Irianda en busca de la tumba de Sari Patricio.
Vemos, pues, que la peregrinaci?n a San Guillermo era el
complemento de la jacobea a' lo cual se debi?,? sin duda, la
fama alcanzada por el santuario fin isterrano en toda la cris
tiandad. La afluencia de peregrinos determin? el auge del
culto hasta el punto de que el citado cardenal Hoyo dice en
su informe que ?hay tres ermitas: (una) de San Guillermo, .,,
(1) Es una verdadera l?stima que no se recor?struy,a este, diminuto
santuario, cuyo coste significar?a poca cosa y servir?a para conservar el re
cuerdo de la antigua peregrinaci?n. ,
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