Dolettn de la Real ylcademia Gallega 149
grab? en.. caracteres g?ticos la leyenda querida de los Andrades,
Ave Maria gratia plena (1) .
El ?bside es de siete lados, con cuatro, largas ventanas, adorna
das dei puntas de diamante, y otra central, rafts corta,: de igual orna
mentaci?n y con un hermoso. ?culo.
El cornisamento es muy sencillo, con curiosos canecillos, y en la
cabez? de los estribos el oso o el jabal?. de los .Andrade.
Gonstituyen una notable particularidad los dos peque??os cuer
pos, : m?s, bajos y m?s cortos. que los brazos del crucero, al que se
hallan adosados.
Los templos rese?ados tienen, como se ve, un indiscutible. valor.
No s?lo . constituyen ?nestimables joyas de la arquitectura gallega
medioeval, sino clue, adem?s, debe apreci?rseles por 1a.singular va
riedad que guardan de arcos'sepulcrales, estatuas e, inscripciones
funerarias, que tanta luz prestan a la historia de Galicia.
La iglesia de San Francisco, especialmente, puede, ser conside
rada como un suntuoso pante?n donde se, guardan las cenizas .de
muchas insignes personalidades gallegas. All? descansan, como sa
bemos, los restos gloriosos del primer senor de Puentedeume; all?
fueron sepultados los Figueroa, Vilouz?s, Aras Pardo?`Ribadeneira,
y tantos otros que, en el transcurso de m?s de dos siglos, se distin
guieron por su bravura y por su generoso desprendimiento en fa
vor de la tiera amada. San Francisco de Betanzos fu?, desde su
fundaci?n, la iglesia preferida por los se?ores e hidalgos de la ciu
dad brigantina para tener en ella sus enterramientos; de aquella
ciudad en.la que, adem?s de su nobleza nativa,se juntaba la de las
cercan?as y aun la de otros lugares muy distantes, hasta el punto
de tener casa en ella como la tuvo Fern?n Perez, crey?ndose que
haya sido la c?rcel actual? los senores que all? no resid?an habi
tualmente, ilegando por eso a. ser llamada en la Edad Media. Betan
zos dos cabaleiros.
L?stima grande que el correr de los siglos, y sin duda m?s que
esto la incuria y poco sentido art?stico de las gentes, no permit=
que se conserven en su primitivo estado tan preciadas joyas de
nuestra arquitectura en los siglos medios.
El convento de San Francisco sufri? muy considerables desper
fectos con ocasi?n de la invasi?n francesa en 1808 (2) .
(1) MURGU?A,, 10C. Cit.
(2) Vid. en la obra de FRAY JUAN R. LEGISIMA, H?roes y m?rtires