Dolelin de la Real 9kcademia Gallega 143
cantidad de marfiles ay un elefante de generosa condici?n, como des
pues se vio por esp?riencia.? Ten?a por objeto la embajada, el pedir
socorro a G?mez P?rez contra el rey de Siam, que iba sobre el de
Cambodje con un numeroso ej?rcito. En reconocimiento de esta ayuda,
se ofrec?a L?ngara por vasallo del rey de Espa?a y promet?a hacerse
cristiano, no dudando que un caballero tan valeroso y esforzado como '
Das Marifias, por ningun motivo hab?a de rehusar.un hecho tan noto
rio en servicio de Dios y provecho de la naci?n espa?ola.
Recibi? el Gobernador el presente y lo satisfizo con otro, y respon
di? a los embajadores dando gracias al rey de Cambodje por la con
fianza con que acud?a a ?l, pero que por entonces no le era posible ir
en su socorro por tener preparadas todas las fuerzas para castigar al ?
rey de Ternate y sujetar este reino y los dem?s de las Molucas. Sin
embargo, que estuviese bien seguro de que en terminando la empresa,
asistir?a en favor de Cambodje con todo su poder. Con esto se Oespi
dieron los embajadores, y G?mez P?rez, no pudiendo ocultar por in?s
tiempo sus designios, se resolvi? a romper el secreto, publicando que
la escuadra y armamentos dispuestos, lo estaban con el objeto de em
plearlos en la conquista de las islas Molucas, prop?sito ya en Espa?a
concebido.
Determin?, pues, la partida, despachando anticipadamente a su
hijo D. Luis?a quien nombr? su Teniente de Capit?n General de la
expedici?n?para las provincias de Pintados, en donde se hab?a de
reunir toda la armada. Dej? el gobierno y justicia de las islas a cargo
del Licenciado Pedro de Rojas, Teniente suyo, y los asuntos de guerra,
al de su Maestre de Campo, Diego Ronquillo, y ultim? los negocios
de Manila de la mejor manera que pudo.
Dos d?as antes de emprender la marcha, asisti? a un banquete en
casa del Licenciado Rojas, y cenando, ?se alegr? tanto, fuera de su
costumbre, y contra la aspereza de su condici?n?, que fu? interpretado
el suceso como ?ltima despedida. Cont? con mucha risa como el P. Vi
cente, franciscano, le pronosticara que hab?a de fracasar en la empresa
por llevar en el ej?rcito gente forzada, y se entretuvo el resto de la
noche en juegos y regocijos.
Embarc?se en la Capitana, fuerte galera de 28 bancos, tripulada
con los 250 chinos y 80 espa?oles, y llevando en su conserva algunas
fragatas y navios menores,' sali? de Manila el 17 de Octubre de 1593,
con seis galeras reales, un gale?n, una fusta, un fragat?n, y otras
muchas fragatas, carcoas y virreyes, que en conjunto hac?an m?s de
200 bajeles, en los que iban 1.000 espa?oles, 1.000 visayas, m?s de
?