Doletin de la Real Academia Gallega 79
testa que hoy sostiene gran parte del criticismo modern?, contra la
creencia de la evangeliiaci?n de Espafia por Santiago el Mayor y por
consecuencia, contra la existencia de su sepulcro en Compostela. Cierto
que de Francia hati p?rtido las negaciones de mayor importancia his
t?rica que contra Espa?a han podido hacerse, en todos los terrenos.
Muchos arque?logos y hagi?logos del d?a, sin descontar los m?s
circunspectos hagi?grafos, f?ndanse para negar veracidad ? la leyenda
,del Ap?stol, en que los mismos inventores de ella han pasado como
sobre ?scuas por el particular detalle de la traslaci?n del cuerpo de
Santiago desde Jope ? Iria Flavia (1), pues, mientras una versi?n es la
del viaje por mar, otra, (que seg?n dicen estuvo muy extendida en
alg?n tiempo), era la del transporte milagroso del santo cuerpo, por los
aires: gy en esta duda el artista se abstuvo de tratar el asunto?.
Ciertamente, la traslaci?n del cuerpo del Apostol, no ha sido mo
tivo de muchas representaciones gr?ficas ? pl?sticas: hasta la fecha, no
conozco mas de dos 6 tres ejecutadas en la Edad Media. Mi pueblo,,
esto es, el pueblo donde nac?, Padr?n, tiene por armas un ?valo que
encierra una barca con el cuerpo del Apostol y los dos disc?pulos ?
popa y proa, en actitud de orar: en la parte alta, campean la cruz de
Santiago y ? ambos lados dos conchas. Pero este blas?n municipal, no
lo he visto esculpido, pintado ni grabado tal y como lo describo, hasta
!lace muy poco tiempo. Yo creo que las tales arenas de la villa de Juan
Rodriguez y de Macias el enamorado, no se remontan m?s all? del pri
mer tercio del s?glo xtx, aun cuando desde que se difundi? por la cris
tiandad la noticia de la existencia del cuerpo de Santiago en la colina
del burgo de Lovio, se tuvo como includable lo de la arribada de la
barca apost?lica al puerto fluvial de Iria.
La m?s secular de las representaciones, que conozco, de este suceso
del viaje post mortem del Apostol Santiago con sus disc?pulos, es de
mediados del siglo x?t. Creo que soy y? el primero que d? noticia de
ello, si bien mis queridos 6 ilustradisimos amigos, se?ores Martinez
Moths y Seijo, registraron tambi?n tan interesante noticia arqueol?gica,
en las notas de su excursi?n por la costa berganti?ana, con motivo de
los trabajos de propaganda para la celebraci?n del certamen hist?rico
arqueol?gico de Santiago, de 1909.
Realmente este monument?, que echa por tierra las afirmaciones
que, respecto de Ia traslaci?n del cuerpo del Apostol Santiago, ban venido
haciendo los contradictores de la leyenda apost?lica, es un monumento
(1) As?, ta se?or?ta Cu?nod, come monse?or Dupr?s y otros contradicto
res, (Duchesne entre ellos), confunden Iria Flavia con Padr?n.