BOLET?N DE LA REAL ACADEMIA GALLEGA 303
se de razones que no son del caso, a ello estaban realmente
obligados.
Aun admitiendo que otros escritores no gallegos tengan
dedicado elogiosas p?ginas a las cosas, figuras y 'aspectos de
Galicia, en realidad puede afirmarse, que probablemente nin
guno habr? tratado nuestros temas con la elevaci?n, el con?
cimiento depurado, el buen gusto y el acierto exquisitos que
Azor?n supo poner en sus renglones cuando de Galicia hubo
de ocuparse. Podr? decirse que entonces el autor, al dejar
correr su pluma para tratar de cualquier tema gallego, lo
hizo como sinti?ndose impulsado ?por un extra?o y singular
movimiento de simpat?a y afecto hacia una tierra, la nues
tra, que ?l, si? no estarnos equivocados, muy contadas veces
ha visitado. Posiblemente le .bast? para que as? fuese, ade
m?s de la honda impresi?n recibida durante alguna r?pida
visita suya a Galicia, el. conocimiento del pa?s gallego, de
sus hechos, de algunas de sus personalidades, m?s salientes
adquirido, como :lector incansable y concienzudo que es, en
sus? provechosas b?squedas por bibliotecas y puestos de
libros viejos, donde sus ojos escrutadores tropezar?an m?s de
una vez? con autores gallegos a trav?s de cuyo conocimiento
pudo llegar : a informarse de matices y aspectos que con
junciona:dos forman lo que Galicia es y lo que Galicia
fu? siempre.
Enumerar los momentos de la obra de Azor?n en que
manifestaciones, peculiaridades, figuras gallegas constituyen
tema destacado, se har?a prolijo y adem?s ser?a innecesario.
Pero, con todo, nosotros de pasada queremos se?alar algu
nos hechos. Y as? un d?a el autor de ?La Voluntad? nos ha
bla de nuestro Murgu?a con manifiesto cari?o y clara loa. Y
otro hace un elogio de la m?sica gallega que a nuestro enten
der es el juicio m?s fino, m?s elevado, m?s exquisito que del
citado tema se ha hecho. Como no podernos olvidar todo lo
bueno, lo interesante, lo justamente acertado y encomi?stico
que de Rosal?a y de su obra lleva dicho. Y que por iniciativa
suya. nuestro gran poeta figura en la excelente ?Historia de
la literatura espa?ola? del gran hispanista ingl?s Fitz ilion
rice Kelly, tan conocida en nuestros centros docentes, as?
como tambi?n que, por la misma iniciativa, composiciones de
Rosal?a alcanzaron el alto honor de ser incluidas en una