118 BOLETIN DE LA REAL ACADEMIA GALLEGA
De su comportamiento en Africa hacen gran elogio cuantos
le han conocido. He aqu? lo que" escribe ` un artic?lista: "...E1
doctor Fern?nd?zVictorio me pareci? un padre cari?oso y bue
no de todos aq?ellos heridos. Es un habil?simo cirujano, que ha
practicado curas prodigiosas, y en quien . todos tienen una . fe
ciega. Es la primera esperanza para el que acaba de sentirse he
rido. Muchos me han contado que, yendo camino del hospital,
sobrecogidos por el temor de la` herida que sentian sangrar, pen
saban' con cierto consuelo:
"El m?dico que ha de c?rarme es FernandezVictorio" (17).
Largo ser?a hater recuent? de sus merit?simos servicios, pre
miados con n?merosas condecoraciones. Por su antig?edad ha
Ilegado al grado de General, pero ni tan elevado t?tulo, ni sus
relevantes m?ritos han dej ado en su alma la m?s peque?a hue
Ila de orgullo. Su car?cter afable y su modestia se revelan en
las cartas y en la correspondencia que he tenido la alta honra
de cruzar con ?l; en una de ellas, contestando a` mi inter?s por
conocer detalles de su larga vida, se limitaba a escribir con trazo
f irme que parec?a de un hombre joven:
"De m? nada ` puedo decirle de importancia, porque nun
ca tuve... Nada he escrito, porque la vida me oblig? a visitar
muchos a domicilio. Por antig?edad llegu? a General. Ahora es
toy en Reserva por edad: 85 a?os. .
"Adi?s, querido amigo y Capell?n. Suyo afmo.
NICOLAS F. VICTORIO
El nueve del pr?ximo febrero c?mplense tres afros del falle
cimiento de nuestro biografiado. Ni Galicia ni Vivero han dado
muestras de luto poi esta p?rdida, si bien he dado noticia de ella
en aquella fecha (is). Pero no es de extra?ar tanto silencio en la
Prensa y en las almas, porque, tanto el finado como su distin
guid?sima familia, huyen de todo cuanto signifique ostentaci?n
(17) "La Correspondencia de Espa?a", agosto de 1907 (n.? del 14 ?
del 16).(is) Con motivo de la muerte de Fern?ndezti ictorio, publiqu? Una
nota en "La Voz de Galicia", n.? del 22 de marzo de 1953.
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