12 BOLET?N DE LA REAL ACADEMIA GALLEGA
V.?Peor. Mal gusto. Un p?blico inculto puede educarse. Un
p?blico que se cree educado y que est? viciado y corrom
pido con comedias est?pidas, no tiene remedio.. . ?Bah!
E.?Realmente hay poco p?blico de gusto...
V.?El artista debe imponerse al p?blico. Yo...
III
Es ahora cuando podemos contestar a la segunda pregun
ta formulada al principio de este art?culo, como complemento
y an?lisis de la carta de ValleIncl?n a Rivas Cherif. ?Se ajust?
don Ram?n en la concepci?n y desarrollo de su teatro al concep
to y moldes por ?l mismo expuestos y propugnados...?
El extenso y variado teatro de ValleIncl?n, dentro de su
unidad de concepto, en relaci?n al espacio de que disponemos,
nos impide una amplia respuesta que, por s? sola, dar?a lugar a
varios cap?tulos de un extenso estudio; por lo que hemos de li
mitarnos a una breve selecci?n de su obra, escogiendo, aqu?llas
que creemos m?s representativas, y que, sin duda, definen y sin
tetizan tanto su obra dram?tica como su personalidad literaria,
al mismo tiempo que permiten establecer el adecuado parang?n
a que nos hemos referido, y valorar en toda su extensi?n el con
cepto que ValleIncl?n ten?a del teatro.
Sirva, pues, de primer ejemplo "Divinas palabras", tragico
media de aldea, seg?n el mismo la subtitul?, en la que cada es
cena se inicia con una descripci?n ambiental, plena de detalles,
que predisponen e ilustran al lector o al espectador, en su caso,
en cuanto a situaci?n circundante de efectos lum?nicos, color,
sonido, fuerza din?mica y de personajes, en panor?micas audio
visuales que, progresivamente, van enmarcando el argumento,
que se culmina y cierra en la escena final, con el desenlace
que, si sobrecoge, aun cuando se vislumbre y presiente, viene a
ser como la clave del edificio literario que corona la ?ltima fase
de la consecuencia buscada y pretendida.
Esta tragicomedia de aldea, escrita en La Puebla del Cara
mi?al y publicada en 1920, es un crudo retrato de una arrai
gada costumbre de la Galicia arcaica y aldeana ?por fortuna
hace tiempo desaparecida, pero que todav?a hemos conocido en
los ya lejanos d?as de nuestra ni?ez?, en la que, bajo la capa