32 BOLET?N DE LA REAL ACADEMIA GALLEGA
del terromontero para irle luego agregando por un solo lado,
en escala descendente, las otras capas que lo prolongasen
hasta darle la forma ovoide.
Los distintos materiales empleados y hasta cierto punto
cuidadosamente separados por capas concordantes, tambi?n
tiene , que llamarnos poderosamente la atenci?n. Unos pudie
ron proceder de las inmediaciones, dadas las condiciones na
4turales de aquel terreno terciario y diluvial; pero otros, tal
como la grava en que entra la pizarra procedente del placer
de un r?o, ya tuvieron que ser tra?dos de otra parte. Meti?n
donos por el siempre peligroso terreno conjetural, con res'
pecto a culturas tan primitivas y desconocidas, avent?rome a
.
co; . esto es que a medida que se iba levantando el t?mulo del
personaje o de la familia, cada gens o tra?lla conducir?a de
puntos determinados, quiz? consagrados por sus m?ticas
creencias, el presente que acreditase su perpetua presencia
material,y espiritual; en suma un piadoso tributo de respeto
y consideraci?n a las cenizas all? depositadas, cual aun per
dura la pr?ctica en el pa?s de arrojar un, pu?ado de tierra
sobre la caja del muerto, en el acto de la inhumaci?n.
En los t?mulos hemisf?ricos que he roturado en la co
marca vine observando que la tierra que la forma es homo
g?nea; pero en uno dolm?nico de la monta?a de Bares, co
rrespondiente a ,la ;V?a Faladora, me encontr? igualmente
con el fen?meno de contener una capa inferior de una gra
villa especial procedente de un punto algo distante. Y en las
famosas tumbas griegas de Sardes tambi?n el terromontero
c?nico se form? por capas 7dispuestas con regularidad (His
toria de los Griegos por V?ctor Duruy, edici?n espa?ola de
1890, t. I, p. 337, nota 1), aunque no nos dicen si eran de di
? versa naturaleza los terraplenes.
La escasa importancia con relaci?n al volumen de la co
lina tumular, de la parte m?s puramente funeraria o sea del
lugar ?llam?mosle de honor? donde se depositaron las
cenizas y su distinta condici?n ?montoncillo de cantos en
uno y nada en otro?, nos producen as? bien mucha extra
?eza, sin f?cil explicaci?n.
?Podremos, por ?ltimo, equipararlos a los long=barrocas
ingleses por la disposici?n prolongada de su planta? Yo creo