BOLET?N DE LA REAL ACADEMIA BALL: GA 17
Es indudalble que el movimiento filos?fico del siglo xvm tuvo di
recto reflejo en la intelectualidad gallega, principalmente en la Uni
versidad de Santiago, donde las nuevas doctrinas lograron apasiona
dos pros?litos.
En las aulas compostelanas sostuvieron briosa contienda el tradi~
cionalismo, all? tan profundamente arraigado, y los disc?pulos de los
avances enciclopedistas, y aun tales movimientos intelectuales llega
ron a perturbar la santa paz de los centros eclesi?sticos.
En los archivos de nuestra Universidad compostelana deben exis
tir interesantes antecedentes de esta agitada lucha, y all? se distin
guieron algunos profesores por su identificaci?n con las ideas en su
tiempo, calificadas de audaces y her?ticas. Don Jos? Vega (catedr?tico
de F?sica 'experimental), Gonz?lez Varela, S?nchez Boado, Fragu?o, Ba
z?n de Mendoza y otros no tuvieron reparo en afiliarse a las f?rmulas
de los principios en debate, sufriendo por ello grave persecuci?n ? pri
v?ndoles de sus c?tedras y vi?ndose yen la necesidad de huir de la ciu
dad?. Baz?n de Mendoza se refugi? en Francia, donde falleci?; y en
Alais, en 1816, se imprimi? una traducci?n suya de la Henriada, de
Voltaire.
Los ?afrancesados? promovieron ruidoso alboroto en la vieja y
gloriosa Compostela y en otras ciudades, como La Coru?a y Orense.
?C?mo extra?ar que en el agitado siglo XVIII ?que extendi? por
Europa las semillas de sus doctrinas? Feij?o 'y Sarmiento ?precla
ros entendimientos de la Iglesia gallega? no pudieran evitar que por
las ventanas entreabiertas de sus celdas penetrase la proyecci?n de
aquella filosof?a?
Y estas extra?as confusiones se proyectaron a los pa?ses de Euro
pa, y Espa?a no dej? de contaminarse de sus consecuencias. Pero sea
de ello lo que fuere, conviene declarar que Feij?o, el europe?sta m?s
significado de su tiempo en nuestro pa?s, mantuvo siempre y en todo
momento su fe religiosa, que permaneci? inmaculada entre los deba
tes de las doctrinas m?s contradictorias.
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En pocas l?neas, Otero Pedrayo traza r?pida semblanza del P. Fei
j?o, Esp?ritu dice? universalmente curioso, ?vido de verdad, ena
morado de la ciencia experimental, y de notable aptitud m?dica, el
P. Feij?o alcanza en cada uno de los m?ltiples problemas que estudi?
una originalidad de juicio y de interpretaci?n pire hacen de,las dos co
lecciones de sus escritos (el Teatro cr?tico universal y las Cartas eru
ditas) llevadas a cabo con sistem?tica perseverancia de luchador, dos
libros inmortales en que se ha querido ver el logro del estilo de ?En
sayo? a la manera inglesa.
Bien puede .afirmarse que el ilustre autor de Ensayo hist?rico so
bne la cultura gallega ha sido y es en la actualidad el m?s .fervoroso y
z
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