? ?olelln de la Real 5kcademia Gallega 12t
Historia de Galicia, ya que los escritores nacionales despreciaban por
sistema nuestras?glorias regionales; pero desdichadamente, la divulga
.ci?n de nuestros grandes hechos hist?ricos, no se ha difundido con la
eficacia que fuera de desear y permanecen sin? ocultos, cuando menos
poco conocidos, no tan s?lo entre los aficionados a los estudios hist?ri
cos, 8416 que tambi?n entre los mismos gallegos, que debieran estar"
m?s interesados en conocer el origen de su raza y las brillantes.tradi
ciones de sus mayores.
?Y qu? duda cabe que los gallegos tienen historia? ?Historia que
hace palidecer por sus hechos la de otras regiones espa?olas que con
perfecto orgullo provincial se vanaglorian de sus grandes hechos de
armas!
Esos hombres.timidos que hacen gala de una rural cortes?a,; mala?
mente interpretada por servil acatamiento, poseen la m?s brillante his
toria con que, justamente puede enorgullecerse un pueblo.
Esa masa rural campesina que, de muchos a?os a la fecha, viene
abandonando la tierra nativa para lanzarse en aventuras especulativas, ;!
desciende de una raza poderosa e invencible; raza guerrera de tes?n tan
admirable y tal viril resistencia, que las naciones m?s conquistadoras
del mundo en pret?ritos tiempos, con el asombro que produce lo ines
perado e incre?ble, vieron detenidos a sus ej?rcitos en las irresistibles
fronteras gallegas y pactar o retroceder sus legiones triunfadoras ante
el inaudito esfuerzo de los gallegos, despu?s de haber sido conquistada
Espa?a.
No eh vano un historiador, doli?ndose de las escasas noticias que
llegaron de nuestros' triunfos en aquellas retnot?simas edades, se?ala
como causa, primordial de tan , lamentable silencio, el hecho ?de que
los gallegos se daban tanta prisa en realizar proezas, que les faltaba .
tiempo para escribirlas y legarlas en imborrables tradiciones a la pos
teridad?.
h'u? el gallego esencialmente guerrero y poco dado a las letras en
los primeros siglos de su organizaci?n pol?tica, y a esto quiz?s fu? debi
do el que los acontecimientos m?s,notables de su historia, se hayan
borrado de los anales de su edad de hierro, aunque no tan en absolu
to, que ligados a extra?os sucesos, pueda f?cilmente el investigador
entresacar noticias de aquellas ?picas luchas sostenidas en aras de sus
sacrosantas' libertades.
Grandemente celoso de su suelo, todas las actividades de la yida
del gallego se reduc?an a los ejercicios, y pr?cticas guerreras, hasta el
punto que eran agricultores; por necesidad y no por inclinaci?n, de lo
?