146 > olettn de la Real ycademia Gallega
El " seguir design?ndose con dichos nombres la zona desmem , i
brada de Galicia, hizo incurrir en notables errores a machos de los
que? han escrito sobre antignedades del pals, por aplicar a la villa
y t?rmino de Ribadeo casos y cosas relacionados con aqu?lla. As?
(para citar algunos ejemplos), en unas Efem?rides ribadenses, pu
blicadas en 1893 por un peri?dico de la provincia de Lugo, se dice
que el 27 de enero de 1377, ?el obispo (de Oviedo) D. Alfonso da 7
en Castropol las Ordenanzas para poblar y gobernar el concejo de
Ribadeo?, noticia que con las mismas palabras aparece en las Efe
m?rides de Galicia g Asturias, publicadas por D. Fermin Canella
y D. V. Vig?n en La Ilustraci?n Gallega,g Asturiana (a?o ,1881),
y en las que tambi?n se l?e que el 23 de marzo de 1368, ?el,obispo
(de Oviedo igualmente) D. Sancho da en encomienda las tierras
de Ribadeo a Alvar P?rez de Osorio?. Y en la Enciclopedia Espasa, ,
en el cat?logo de fueros, se incluye como concedido a Ribadeo uno
dado a las tierras de Ribadeo por el citado Obispo D. Alfonso. "Y
en una serie de art?culas que vieron la luz en una revista riba
dense: se extractaron, creyendo hacer con ello un servicio a la his
toria de la villa que fu? de los Villandrando, varios documentos
existentes en el archivo de la catedral de Oviedo, entre los que figu
ran: uno por el cual el obispo de aq?ella di?cesis, D. Fernando,
en marzo de 1238, ?da licencia a su concejo y tierra de Ribadeo
para que pueda hater puebla en Castropol? ; y otro por el que se
concede a la tierra de Ribadeo el fuero de Benavente. Y, por Ulti
mo, en la Gala de Galicia del Sr. Otero Pedrayo, se asegura que
?por sus relaciones (las de Ribadeo) con Asturias y por el car?c
ter gallego del pals inmediato, entre Eo y Navia, existi? mucho .
tiempo en la catedral de Oviedo la dignidad de arcediano de Riba
deo...?
Todo esto, por no pararse a considerar, los autores citados, que,
no habiendo pertenecido nunca la villa de Ribadeo a la di?cesis de
Oviedo ni al se?or?o de aquellos obispos, ?stos nada ten?an que dar
ni encomendar en ella.
Los que consideraban bien las cosas eran los regidores que Ri
badeo ten?a en 1842. Conocedores de la Historia y amantes de su
Galicia, aquellos representantes del pueblo se dirigieron al Congreso
National en enero del a?o citado, solicitando con razones s?lidas
la formaci?n de una quinta provincia gallega, para lo cual debia
agregarse a este Reino la parte occidental de Asturias, desde el r?o
Navia. El Congreso Nacional no ? accedi? a la razonable pretensi?n