BOLETIN BE 'LA sREAL ACADEMIA GALLEG? 267
v?n nosauyalinap rendida?
yanque a : gozar ,nos ' convida.
o chan de praceres ch?o,
? 1,.?Tor facer q?e: o deseo
polos sintidos guiado,
de cote contrariado,
e?venene o''noso seo"
No es fatalismo ni 'pesimismo enervador lo que las anterio
res palabras r?zuman,es.laconcepci?n cristiana del dolor acep
tado; es la tetra, a: tant?`s d?as vista, endosada a Los .Bancos. del
Cielo, en donde se halla el ? verdadero descanso. La vida se nos
va a pedazos, como+'pingajos'"de tin vestido viejo' y no es cosa
que la lloremos y querarnos disfrutar pantagru?licamente, a in
manera de los h?roes' rahel?sianos. El ' lieir po no ?os pertenece;
ni es cosa de que nos afanemos por ?L '
"Son os anos, lamen follas
do inmenso Ohre do tclnpo
qua p?r' natural desgasle
?van ' caendo ! ?van caendo! ?
? cargados c'as ?vanidades
5 e'so?os do pensamento;
c'o peso 'dos desenga?os
? desairados deseyos,
dos mesmos que pore xigantes
os pu?os o ceo ergueron,
sin maxinar ? ai coit?dos !'
qu'eran nenos... ? ? eran nenos!"
0 albre da IIest?rea.
Hab?a en esto, como en otras teor?as y meditaciones del au
tor, un halo de romanticismo ?uya aparici?n y triunfo dejaron
huella y sombra en 61; tal vez hubiese le?do el pr?logo de Cron
wel, y aun quiz? figurase en su ? biblioteca, a1: lado de Chateau
briand y otros rom?nticos que en ella aparecen.
Ya hemos visto su admiraci?n : por Zorrilla, hierofante de in
escuela en Espa?a; pues bien, su afici?n a los poetas extran