248 BOLET?N DE LA REAL ACADEMIA GALLEGA
gonensis, per medium Scyllae atque Caribdis transire. ?M?s,
como tan dif?cil y peligroso era pasar por el reino de Arag?n,
m?s aun que por entre Escila y Caribdis? Cita que viene a
ser como un eco lejano de la primera alusi?n hecha ya por
Munio y Hugo en el Cap. I, Lib. I (P. Fl?rez, 6) al 'narrar la
traslaci?n del Ap?stol. Del mismo Virgilio se utiliza en dos
ocasiones una nueva cita; La primera vez Ja encontramos en
el Cap. CXIV, Lib. I (P. Fl?rez, 229) en estas palabras:
Fama, qua nullum malura est velocius, refert milites Episcopi
el Reginae invasisse Compostellanos (?La fama, m?s veloz
que todos los males, susurra que los soldados del Obispo y
de la Reina acometieron a los Compostelanos? ), que coincide
con las de Virgilio: Fama, malura quo non aliud velocius
ulluco, (Aeneidos, Lib. IV, v. 175). Se recuerda nuevamente
en el Cap. VIII, Lib. II (P. Fl?rez, 269). As? : lam futir fama
malum, quo non aliud velocius ullum mobilitate viget, repro
duciendo, pues, m?s exactamente a Virgilio. de esta vez.
Al lado de Virgilio encontramos tambi?n a Horacio citado
con cabal exactitud en el Cap. LIII, Lib. II (P. Fl?rez, 368)
al reprobar la veleidad de la Reina Do?a Urraca : Nempe
uerum est illud poeticum: Quo semel est imbuta recens, ser
vabil odorem testa diu. (Episi., Lib. I, ?pist,, II, vv. 6970.
?Que es verdad aquello del poeta.: Conservar? la vasija por
mucho tiempo el olor de que se impregn? cuando nueva? .
Finalmente en el Cap. LIII, Lib. II? (P. Fl?rez, 591), con
denando la codicia que supone en Alfonso VII, que hab?a
arrancado dinero por violencia al Arzobispo, el mismo Gi
raldo utiliza un s?mil hist?rico comparando al Emperador
con Craso, dictador romano, y prorrumpe: Idem Imperator
non minus aestuans amere pe?uniae guara Crasus, Dictador
romanas, cuius eral conditio quosqunque raptos pro pecunia
extorquere et iustitiam pro auro el argento uenundare....
III. LA .F LORACI?N DEL ROMANCE
A lo largo de las p?ginas de la Compostelana se percibe ?
un rumor de muchedumbres que sus redactores incorporan
a la narraci?n hist?rica con un innegable acierto no solamen
te pol?tico ?en cuanto estas muchedumbres sirven para des