$olettn de la Real ylcademia Gallega 5
rador m?s eficaz, ilustrado y perseverante del Licenciado Ba?os:. el hasta
ayer merit?simo secretario general del Centro Gallego, hoy su dignisimo
Presidente titular? Encomiar aqu? los m?ritos y virtudes c?vicas del se?or
,L?pez P?rez, seria repetir para los gallegos una vulgaridad insigne.
(Aplausos.) Ap?stol elocuente y convencido del esp?ritu de asociaci?n,
luchador incansable por elevar en todo tiempo el nivel moral de la colo
nia gallega, palad?n esforzado para todo empe?o progresista y patri?tico,
el Sr. L?pez P?rez ha escalado la presidencia del Centro Gallego, rodeado ?
de sus grandes prestigios, con la aureola de sus reconocidos mereci
mientos y por el voto espont?neo y un?nime de todos sus coasociados.
(Aplausos.)
Pero hay algo, se?ores, que no puede pasar inadvertido: hay algo
que conviene se?alar, porque a la par que enaltece al, Sr. L?pez P?rez
.habla muy alto en pro de la colonia gallega, pues demuestra que en
nuestra masa social existe un 'esp?ritu insuperable de justicia, que, ajena
a prejuicios y atenta tan s?lo al" cumplimiento de sus deberes, da al C?
salo que es' del C?sar, o, en otros t?rminos, a cada uno concede su
merecido.
El Licenciado L?pez P?rez,`se?ores, no es un gallego nativo,' es un
gallego de origen, es un merit?simo oriundo de Galicia. Todos sab?is
que en cualquier sociedad; especialmente en corporaciones que cuentan
por docenas de millares sus asociados, hay constantes fermentos de pa
si?n y g?rmenes de lucha, signos "de vitalidad, seg?n la teor?a de los
soci?logos y fil?sofos modernos; todos sab?is que cuando entre elemen
tos afines surgen candidatos a ? la m?s alta representaci?n social, cada
uno d? los bandos contendientes saca un cristo, una bandera, un ardid,
o como ustedes quieran llamarlo ?yo le dir?a una puerilidad?, pues
para m? son igualmente apreciables los hombres que surgiendo del pro
com?n se hacen acreedores a los sufragios. de sus coasociados, . En este
caso alguien pudiera arg?ir que el Sr. L?pez P?rez no era gallego nativo
y, al objeto de halagar el 'natural patri?tico de las multitudes, tratar?a
de oponer a su nombre ilustre, otro no menos ilustre de un conterr?neo.
Y, sin embargo, se?ores, al Licenciado L?pez P?rez,, nadie lo ha. discu
tido ?nadie osar? hacerlo ante el grande relieve de su nombre! Pero, al
contrario, si someti?ramos a un plebiscito la voluntad de los socios,
seguramente. que todos habr?an de proclamar al un?sono:. ?Al cesar
reglamentariamente en la presidencia del Centro Gallego el Licenciado
Secundino Ba?os, el ?nico que en justicia puede y debe sustituirle es el Li
cenciad?'os? L?pez Pires, (Aplausos.)
Y es, se?ores, que la colonia gallega que estim i la gratitud co no
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