38 BOLETfN DE LA ACADEMIA GALLEGA
uniforme de un clar?n sin agudeza y de un tambor sin ronco son,
que llamara a la humanidad al file cumplimiento de un deber;
el d?a en que la tierra, p?or prodigio de ingenier?a, perdiera sus
relieves, su variedad y fuera mar de arena o de verdura; el
d?a en que la uniformidad imperase sobre la tierra, yo no se
lo que el progreso habr?a ganado, pero s? que habr?an que
dado destru?das dos cosas que me encantan: la una, Espa?a, no
s?lo por haberse absorbido su indepe?dencia, sino por haber arrui
nado esta espl?ndida, inconfundible variedad quo es la entra?a dc ??R?0?
J ? ??W/??G ??o0 `?
?
? su Historia, la esencia de su pujanza. Y la otra cosa que habr?a
quedado destru?da en la uniformidad, s?r?.a la poes?a, hlas?n de
nobleza de la Hum.anidad y cumbre de clevaci?n del sentimienio.
El d?a en. que hubiera una sola lengua por la Tierra, quo su
pone una sola civilizaci?n, una sola historia, estranguladora de las ??R?0?
J ? ??W/??G ??o0 `?
? dem?s, un solo pensamiento, ?qu? quedar?a de la poes?a? El poe
ta para scrip, y grande, necaesitar?a ser, no ya ungido de Dios, sino
el enviado de Dios, como capaz de comprender la unidad total, y
al sentir la voz del Creador, esta le dir?a, como nuevo canto para
el resurgimiento de la Humanidad: ?Vuelve a la variedad que yo
d? al mundo, porque yo escrib? con la tinta de la luz y matic? con
el velo de la sombra; yo escrib? en los espacios del firmamento
con la variedad inmensa de los mundos giratorios o errantes, y
a?n me pareci? quc era poco y quo necesitaba renovarlos; yo
mismo hire hablar a la creaci?n no con la prosodia uniforme del
sonido, sino maliz?ndola con el eco y las modulaciones de todos
los vientos, porque la Creaci?n, la Historia y el Mundo son vare ??R?0?
J ? ??W/??G ??o0 `?
?V'
?{ dades ?spl?ndidas, solo en mcdio dc las cuales se afirma la unidad
suprema? . (Muy bien).
Y otra poes?a qu?e me impresiona y quo casi me llama, porquc,
por una adivinaci?n del poeta, llevaba una dcdicatoria. quo a mi
no me podia comprender sin usurpaci?n, es aquella poes?a quo el
vale dedic? a D. Emilio Castelar, cuya doble herencia, como Jefe
de la Bep?bilea Espa?ola y como Academico de su hahla, me toc?,
para humillar mi modestia y recompensar Tpi vida, el honor abru
mador de recogerla. En aquella po?es?a, Curros Enr?quez, dirigi?n
dose a Castelar, le conf?a y le entrega los tullidos, los lisiados, lo ??R?0?
J ? ??W/??G ??o0 `?
?
pobres, los d?biles del orden moral, para quo llaga con ellos el