BOLET?N DE LA ACADEMIA GALLEGA 37
poeta civil o politico sin toner esa sensibilidad representativa, . sin
ser m?s quo el hombre pero no reflejo de la comarca, el pueblo,
la regi?n, la patria, per exeelsas quo sean sus condiciones, ;no
pasar? de ser el sectario, el libelista, el pendenciero, el luchador.
Para ser lo quo fu? Curros Enr?qucz se necesita entregar la pro
pia personalidad .a la grandeza de la otra, apartarse el vate y que
surja la regi?n enter.a, y si han de surgir figuras individuates,
quo sean tan humildes, tan representativas como la del pobre
gaitero de Penalta.
Dos poes?as dc Curros me han producido una enorme impre
si?n: es la primera aquelia, de ordinario amanerada, habitualmente
fr?a, cl?sica y ret?rica, quo en ?l es ternura, desbordamiento del
alma; la introducci?n a sus poes?as en galtego. En ella se plantca
la alternativa, la duda angustiosa de si el gallego es una lengua de
rinc?n o si ser?, en la ilusi?n do su esp?ritu, lengua universal. Y
cuando el hombre que canta el progreso y siente la fraternidad de
toda la tierra quiere resolver la ant?tcsis que tortura su esp?ritu,
la resuelve por media de la hip?rbolc, sin la cual no habr?a jam?s
un poela, porque la hip?rbole es la pujanza de un esp?ritu colosal
que ve las cosas m?s grandes quo los dem?s, quiz? porque las ve,
por privilegio, tal coma son. La hip?rbole es la valent?a de esc
esp?ritu, quo se atrev? a mostrar l? magnitud de su concepci?n
ante los esp?ritus enanos, sin miedo al rid?culo.
Piero aquella antitesis quo tortura el esp?ritu de Curras Enr?
quez, me ha hecho medilar en esta alternativa : ?es que para una
lengua no hay m?s opci?n que extin,guirse o llegar a ser universal?
No. Y para una lengua de poes?a, menos. Precisamente el secre
to, el ?xito del poeta es penetrar en el rinc?n, abrir con cuidado
todos los repliegues del alma gallega y mostrarlos, y una lengua
universaI no tendr?a repliegues, no tendr?a f?sonom?a, no tendr?a
encantos. (Grandes ,aplausos).
El d?a en que per 1a tierra circularan multitudes quo, dejan.do
en la curiosidad de los Muscos la belleza deslumbradora dc los
trajes region.ales, llevara la uniformidad regimentada, sin marcia
lidad, sin nada lum?noso, sin brillo y sin hlcha; el d?a en quo la
m?s ca extinguiera, en el recuerdo, la variedad infinita y sanl a
de las canciones de comarca; el d?a en quo fuera la m?sica