ijolelin de la "Real Academia Gallega 27
)Diversas han sido,las opiniones.acerca>de los castros. Por su,nom
bre latino (castra) han sido considerados como campamentos construidos
por los romanos. Hoy se consideran obra de los primeros abor?genes,
fueran estos los iberos, los celtas u otros'. los primeros constructores, y
que tales edificaciones fueron aprovechadas en parte por los romanos,
con el objeto de acampar en ellos algunos destacamentos, para la ocu
paci?n militar del pa?s. Buhort de Reners, dice que los grandes .castros
?los del adjunto mapa lo son todos? son galos (celtas) y que los que
presentan formas geom?tricas y rectil?neas son romanos. El distinguido
arque?logo Sr. Villaamil y Castro se hace solidario de tal opini?n (I).
En los castros hay 'que estudiar su situaci?n, uso para que fueron
construidos, tama?o o extensi?n y forma, objetos que en ellos se en
cuentran, direcci?n bajo el punto de vista de la que trajeron los pueblos
emigrantes y de la primitiva estrategia militar.
Pueblos que, o carec?an de armas o eran estas muy rudimentarias,
y que llegaban a ocupar un pa?s en que la vegetaci?n era muy abundante,
y donde pululaban los animales feroces, nada m?s natural que para
dominar el terreno y ponerse a la defensiva de las fieras, y a?n de otros
hombres, si los hab?a, que ocupar los puntos de mayor elevaci?n. Los
castros debieron servir en los primeros tiempos, adem?s de lugar de
habitaci?n y de defensa, de templo, dig?moslo as?, o punto para practi
car sus ritos religiosos; pues en demasia se sabe cuanto tiempo dur? la
pr?ctica de adorar a los dios?s de los (lugares, altos*, de cuyo culto
aun hoy quedan reminiscencias en las hogueras que en los puntos m?s
elevados encienden los campesinos en la v?spera de ciertas fiestas. Sabi.
do es cu?n variable es la extensi?n de estos monumentos; en este pa?s
se aprecian bien sus dimensiones, sobre todo en aquellos, cuya plata
forma?llamemos as? a la superficie rodeada por, el parapeto o muro
de defensa? se dedican al cultivo; pero generalmente son muchas las
fincas que dentro de cada castro tienen cabida. La forma m?s general es
la circular, m?s o menos exacta; algunos son ovalados, otros de formas
caprichosas (los menos). Mas ninguno he visto de formas rectil?neas en
? sus caras o poligonales geom?tricamente hablando, en su conjunto. To
, d?s se acercan m?s o menos al circulo. Unos comprenden un solo recin
to, otros tienen agregaciones muradas; y hay alguno ?como uno de los
que se?ala el adjunto trabajo, en Braftas, t?rmino municipal de Toques,
lugar dos Castros? en que se ven tres de "?stos, escalonados desde la
base a la c?spide de la eminencia que asientan.
(z) Galicia Diplom?tica, in, p?gina 27o.