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cimientos de la antigua ermita de Santiago Ap?stol, perteneciente
a la parroquia de San Lorenzo, de Remesar.
Mide esta piedra, que es de granito duro, treinta y dos cent?
metros de alto, poi diecis?is de ancho en la parte superior y'vein
tiuno en la inferior, con un grueso de cuatro cent?metros. Est?
ligeramente arqueada, correspondiendo su + parte convexa ` a la es
p?lda de la figura humana que repre
.a v .; senta. .
s ,~. ~ Indiscutiblemente la grafia que ostenta
f/ ~r r `s = i ` en una de las superficies, ,se adapta a la
~~ caracter?stica de la ?llamada escultura la
r r * . pidaria ?placasIdolos u (Fig.' 1.a ) . El
"'" "' ?, rostro humano esquematizado, se expre
; + F, i; f ? sa cual la t?cnica de su tiempo, y los
r cuatro trazos paralelos vienen a indicar,
r 'tr r `; ` con s? convencionalismo de ?poca, la ?
~1 `'' vestidura, como por ejemplo se ve asi
s4, ;.w'' : expresado, p?r lineas igualmente parale
' ?' y?j las, en la famosa composici?n de Pella.
Tit (Llanes).
Fig. 1?a En la superficie posterior, se , mues
tran elementos geom?tricos donde entra
la simplificaci?n, . no exenta de realismo, en el detalle de cuerpo, o
figura humana, en su modo : de ser convencional esquematiza
do. (Fig. 2.a).
Se trata de una piedra decar??ter antropomorfo, propia para
lucir en posici?n enhiesta, por acusarlo as? la circunstancia de
estar grabadas las dos caras.
Las ?;placas?dolos m?s, generalizadas son las de pizarra, tan
propias,del c?rculo cultural del occidente. de la Peninsula o portu
gu?s, predominando en ellas caprichosas figuras geom?tricas con
decoraciones variadas de ajedrezado ? a base de tri?ngulos, bastante
sim?tricos, o de zonas rayadas inclinadas en forma de .espina, de
pez, observ?ndose en, algunas un conjunto de l?neas en las que noi
es f?cil descubrir figura determinada y acus?ndose algunas veces
la indicaci?n grabada de las cejas, ojos, nariz y, en l?neas, la boca,
cuello, cintura, etc. Llevan casi ; siempre un taladro, en la parte
superior que pudiera ser de suspensi?n, o dos, figurando los ojos,
y com?nmente, son de forma trapezoidal.
El ilustre arque?logo D. Jos? R. M?lida ?firma, que en las