BOLET?N, DE. LA, REAL ACADEMIA GALLEGA 213
tencia prof?tica para nuestros d?as, plenos de zozobras y de
incertidumbres!
Al declararse la guerra francoprusiana se encontraba La
Sagra en. Par?s y decidi? trasladarse a Suiza, donde fu? aco
gido muy afectuosamente: ?dice uno *de sus bi?grafos? por
sus amigos cient?ficos de Neufchatel, en donde hab?a de mo
rir al poco tiempo, dejando abandonado en la capital de
Franciasu; segunda patria? todo su archivo literario, li
bros, memorias, apuntes, cartas, etc., expresando en una cr?
nica al Diario de la Marina, de.La Habana, sus temores de
que los utilizasen para construir barricadas en la tremenda
lucha que se avecinaba.
Es creencia general que La Sagra falleci? en Neufchatel
(Suiza) en 1871, y as? lo afirm? tambi?n Carr? Aldao, si bien
posteriormente indic? que por informes recientemente reci
bidos de Par?s; casi puede asegurar que falleci? en la capital
de Francia el. d?a 25 de mayo de dicho a?o.
La Sagr, un buen espa?ol
Aparte de los estudios de La Sagra sobre diversos y m?l
tiples temas, y de, sus actividades econ?micas, pol?ticas y so
ciales, hay; que considerar en ?l un hombre ?til a su pa?s.
No ha sido uno de tantos idealistas que se entregan a
abstrusas concepciones. La Sagra es, ante todo, un buen
espa?ol.
'Comienza, su vida'. p?blica al emprender su viaje a la isla
de Cuba, cumpliendo una comisi?n que le confiri? el Go
bierno espa?ol en 1825 para el estudio en Burdeos y en Tou
louse de procedimientos de fabricaci?n de tabaco, al objeto
de aplicar la reforma en nuestra antigua colonia; y m?s tar
de es honrado con el, nombramiento de profesor de una c?
tedra de Historia . natural.
?Para qu? recordar ahora cu?nta ha sido la extraordina
ria actividad desarrollada en Cuba para fomento de sus
riquezas: y progreso . de sus ense?anzas, seg?n ya se indic??
Toda su labor en aquellas tierras es la de un espa?ol, que