ellel(? d? 1? teal 5Icad?mia Gall?ga 35"
del Louvre y ten?an 29,5 gramos, pero otro peso de serpentina que hay
en el mismo museo y que est? como sali? de la inano del que lo hizo,
?tan hermosamente se conserva!, vi? que no ten?a sino 29,48 gr. mien=
tras que otro marcado con tres puntos pesaba 89,06, o sea tres onzas
de 29,68 cada una (1). Letronne, del peso de las monedas, hall() que la
libra romana era igual a 325,55 gramos, mientras que Cagnazzi toman=
do por base pesas halladas en Pompeya vi? que era igual a 325,84. Y
si tom?ramos como regla el ejemplar de V?zquez Queipo ser?a
la libra romana equivalente a 356,24 gramos, que es, como vemos, n?=.
table diferencia. Es que ni los griegos ni los romanos ni ninguno de
los pueblos de la antig?edad hab?an heeho los concienzudos estudios
que de las pesas y medidas se han hecho e?, nuestros (Has,' ni busca
ban ellos en sus trabajos esa grande exactitud que entre nosotros se
desea. Los constru?anpara los usos ordinarios de lavid? y se daban
por satisfechos? con una exactitud aproximada. LQu? sabian ellos si,el;
agu? pesaba mas a cero o a cuatro grados sobre cero?' Ni tenian ter
m?metro para medirla ni jam?s se le hab?a ocurrido a ningunoseme
:jantes m?nudencias. Para el peso parece que se servian del vino (2),
pero no habian quiz? observado que no todos los vinos tienen el mis^
mo peso (3).
Es verdad que en Roma se guardaban en elcapitolio l?s pesas y
medidas (4) a las.que se hab?an de ajustar las dem?s para que fuesen ?
legales,pero tambi?n sabemos por el testimonio de Ammiano MarcelinoY
que hemos copiado en el art?culo anterior, que Pretextato, Prefecto de
Roma, tuvo que establecer en diversos sitios de la gran ciudad pesas
y medidas "cum aviditati nzultorum ex libidine trutinas componentium
oc`curri?nequiret,, porque no se podia poner freno a los much?simos ,
que para ganar se daban a hacer pesas y medidas. Querian ganar no %
(1). Es de notar a este prop?sito el testimonio de Galeno. Este c?lebre m?dico,
hizo, como era justo, notables estudios sobre los pesos y medidas de su tiempo para
ordenar las recetas que los m?dicos recomendaban, y de ellos sac? que ?nonnullos
E viginti unciis, quosdam sedecim minam aestimare, ut heminan (media mina) alios
unciis novem, alios duod?cim.? De Compos, medic. L. IV. cap. IV.
(2). As? parece demostrarlo el congio de que hemos hablado en el articulo an
terior que sirvi? de base a estudios del P. Villalpando, como entonces digimos, y que
hoy se guarda en el museo de Dresde, cuya inscripci?n termina con estas letras: PX,
que valen como sabemos ?Pondo decem? o sea 4de peso diez libras? porque pesaba
diez libras el vino que llevaba, pues vino era lo que por ?l median. Y en el plebiscito;
de P. y M. Silo se manda que el congio tenga 10 libras de vino y el cuadrantal, 80.
I,' . (3).. En Plinio creen algunos ver indicaciones de esto.
(4). Y era esto comun a todas las ciudades segun las disposiciones imperiales.
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