ijolet'?i de la Real Academia Gallega 29
de Segovia, debido s?lo ? sus m?ritos; por ser de los pocos que supieron
substraerse ? los movimientos pol?ticos de aquellos tiempos.
En este puesto, dificultoso de por si y mucho m?s por los trastor
nos y azares de la ?poca, en que la facci?n invadi? la provincia de su
mando, di? gallardas muestras de su intrepidez y arrojo, ? pesar de sus'
no muchos a?os ?contaba solo 28?cuando sitiada la capital, el cumpli?
con su deber temerariamente qued?ndose en medio de los contrarios en
?los pueblos invadidos y sosteniendo comunicaci?n dificil?sima y cons
tante con el gobierno.
Premi? este sus servicios con la magistratura en la Audiencia de
Valladolid y en 1839 pas? ? C?ceres con la doble autoridad de Inten
dente y Jefe pol?tico cuando el ministro, Pita Pizarro, puso en una sola
mano estos dos poderes.
No seguiremos paso ? paso la carrera pol?tica de Pastor D?az. Solo
? ? grandes rasgos indicaremos lo m?s saliente de su vida p?blica, que
adquiere gran relieve con su manifiesto de 1839 ? los electores de C?
ceres y su franco y leal acatamiento ? la Constituci?n de 1837, que
fueron la cararacter?stica de su pol?tica y le valieron el sobrenombre
de el Puritano.
En el pronunciamiento de 1840, su ida ? Valencia ? conferenciar
con Maria Cristina, cost?le la prisi?n ? su vuelta ? Madrid. Puesto en
libertad por no resultar cargos contra ?l, hizo en El Correo Nacional,
brillant?sima campa?a memorable en los fastos del periodismo espa?ol.
Enfermo en 1841, agrav? su dolencia la muerte de su padre.
En 1843 nombr?le diputado la Coru?a, y disueltas las Cortes
vuelve '? ellas representando ? C?ceres, haci?ndolo m?s tarde por otros
distritos. En las Cortes se revela como orador no menos brillante que
periodista y poeta y lo mismo que como hombre de estado.
Aqu? parec?a haberse cortado su carrera politica, pues durante
nueve a?os no alcanz? puesto alguno en la Administraci?n del Estado;
pero hall? honrosa posici?n en el que por su honradez y talento le
brind? el comercio madrile?o, e?n la Secretar?a del Banco de Isabel II
que acababa de `establecerse. ?
;,/ Las m?ltiples cualidades de Pastor D?az se mostraron una vez m?s,
y en` su puesto di? claras pruebas de la flexibidad de sus prodigiosas
dotes, apareciendo como estadista profundo y economista h?bil. Sus
ocupaciones burocr?ticas le permit?an, as? y todo, publicar folletos como
el titulado ? la Corte y ? los partidos, escrito en 1846.
Llamado en 1847. para la Subsecretar?a de Gobernaci?n, al poco
tiempo desempe?? el Ministerio de Comercio, Instrucci?n y Obras p?.
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