BOLETIN DE LA+. REAL'. ACADEMIA' GALLEGA S
de' Estudios' Gallegos' ' y=en' la Real, Academia Gallieg?,' con los 'traba
jos mediante los cuales'colabor?ten la iii?)ii de los"resp?ctivos
fines de ambas entidades culturales.
Contaba nuestro inolvidable am.igo`entre los m?s preciados lau
reles conquistados con su incansable pluma laos ' premios obtenidos
en cert?menes a los que acud?a. siempre que se tratase de abordar
temas gallegos. Entre esos galardones figuran los alcanzados en los
Juegos Florales de Betanzos con su novela hist?rica ?Manden?, lue
go publicada en el Anuario de dicha ciudad, correspondiente al arlo
de 1948; en el concurso promovido por el Centro Gallego de Ma
drid, para la justa exaltaci?n de la figura del novelista e historiador
gallego Benito' Vicetta, y en el concurso literario convocado por el
Casino deNoy?, al que present? un trabajo sobre don Eladio Ovi?
do` y Arce, `compuesto en colaboraci?n con el celoso investigador de
nuestras letras y notable escritor Juan Naya. "'
Dejo ?scrita una biograf?a de Pastor D?az intitulada `?Pastor
D?az, unha vida exemprar?, que ser?a muy de celebrar viese pron
to la luz, y preparaba dos ,obras que no dudamos en calificar !'de
trascendentales ; una biograf?a del Patriarca de las Ietras gallegas
don Manuel Murgn?a, densa y minuciosa, que ten?a muy avanzada,
y un ensayo sobre ?O fe?to ling??stico?. , L?stima grande que la
muerte truncase sus afanes por servir y enaltecer a Galicia, cuando
la madurez, de su inteligencia nos permit?a esperar de ?l sazonados
frutos literarios.
Si la obra de Ram?n Villar Ponte atrae nuestra admiraci?n,
el hombre merece nuestro mejor y m?s acendrado recuerdo. Como
prendas esenciales de su car?cter lsobresal?an la lealtad, exterioriza
da en una afecci?n constante pero inteligente hacia los amigos, las
convicciones, y la sinceridad, que .le mov?a :a no, rebozar nunca sus
juicios, impregnados, empero, de un sentimiento de cristiana bon
dad: Ambas . cualidades, morales constitu?an los dos filos, por as?
decir, de su noble humani,d.ad, y no; es : extra?o, ; por ello, : que per
sona de tales dotes recogiese, a su vez, la adhesi?n y el entra?a
ble afecto de las gentes.
No cabe pensar en el admirado amigo muerto, : en su recia ;'y
honda condici?n humana ni, sobre todo, en su obra, desde el estre
cho ?mbito de una nota biogr?fica, sino a trav?s del m?s amplio es
tudio que su vida ejemplar merece o frente al paisaje que ?l: tanto
am?.. As? pens? en ?l, seg?n confiesa en el poemaeleg?aco ,que le