I O BOLET?N DE LA 'REAL ACADEMIAc GALLEGA,
pert?simo conocedor del derecho, privado,: con; amplia; base
romanista y < ;directos saber no s?lo de la f costumbre gallega
sino del' antiguo estilo de la Real Audiencia. Sus publicacio
nes sobre este tema;. una'en gel''BOL'ET?N d?. nuestra Academia;:
reflejan tan s?lo parte m?nima de su competencia en temas'
por desgracia poco trabajados: 'I' 1. 1(.!!'!' r,
Atra?do por la pol?tica; alcanz?' pronto 'el `puesto' de' dipu
tado provincial en La Ceru?a 'que 'vino` ` ?cupando` durante`
veintis?is a?os, " siendo presidente ` 'de `1a Diputaci?n " entre
1903 ; y .1909.
Este per?odo de su actividad como presidente fu? fe
cundo para nuestras letras .,Murgu?a ocup?. el cargo de archi
vero de la Diputaci?n; se subve?ici?n? 'a la Real Academia
Gallega.;,, se foment?, mediante subvenciones ,y adquisiciones,
la publicaci?n de obras, del propio aMurgu?a, Mart?nez Sala
zar y Carr?., Aldao, y, , de los . ?lbumes ; conmemorativos del
Centenario de la Independencia. En esta edici?n 'aparece, uno
de sus primeros ,trabajos, sobre el combate de Herb?p ,~ Des
de otros puestos ,pol ticos, el,de gobernador civil entre ellos,
supo , recordar tambi?n a' Galicia. Cuantas veces . se llamo a
su puerta con una iniciativa en bien de nuestros' estudios se
hall? unaacogida llena'' decordialidad.
Con ' ?l 'se han ido mem?rias' gratisimas 'de''setenta"a?os
de tertulias literarias 'de Galici?.`''Don Ram?n' Tojo era 'ar
chiv? viviente d? los recuerdos' de' la vida' de' Rosal?a "eri Pa
dr?n y hab?a convivido ' en La ' Cor?na 'e?n la ?Coya C?lti
ca? en Lugo con Amor M?il?n, Ve"ga`Blanco y Montenegro;;
con don "Casto S?mpedro, en fin, ?n'sus d?as de quieto retiro
pontevedr?s...
Pocos como'don Ram?n Tojo han podido' conocer a nues
tra tierra a trav?s' de sus gentes 'ilustres, 'que trato 'con' inti 1
midad, de sus ciudades, 'donde' donde' mer?, de' Sus libros;, que am?
apasionadamente.' Pocos g?lleg?s podr?n' ddj?r'cot?? ?l tan
ancho cauce de amistades ,r un tan hondo vac?o entr? quie
nes' ten?an la suerte de "frecuentar su trato. 'En muchos hoga
res se habr?n elevado oraciones al correr la neti?ia d? su
muerte; ante la caja que` encerr? el cuerpo' todav?a.` vigoroso
del que 'aun' ayer nos entregaba el don' inestimable ,de sus
recuerdos, pudimos 'exclamar ?toda Galicia vai n'ela? .
.d. F..
?