ljolelin de la Real Academia Gallega 273
Con sus cuidadas y esmerad?simas ediciones de cl?sicos espa?oles,
demostr? Krapff ser el hombre que precisaba Galicia para que, reanu
dando las tradiciones de los editores Soto Freire, Compa?el y M?guez,
fuese la ciudad de Vigo la cuna de una colecci?n de ?Bibli?filos gallegos?,
que tan necesaria se hace en nuestro desarrollo intelectual. Editor mo
delo, su p?rdida ha sido irreparable, y quedan para gloria de la tipogra
f?a gallega las obras impresas por el, hasta hoy., insustituible editor.
Bien merece Eugenio Krapff, no este modesto recuerdo, sino otro
m?s importante; pero mientras no se realice vayan estas l?neas consagra .
das a su memoria.
De las obras que edit? damos noticias m?s adelante; pero consigna
remos aqu? que tenia, a su muerte, casi terminada la impresi?n de Viaje
por Galicia, del tambi?n finado D. Isidoro Bugallal. Tememos que ?ste
y otros impresos del Sr. Krapff, todos hayan desaparecido para siempre,
y sus primores tipogr?ficos fueran destinados a papel de envolver.
Pero es tiempo de terminar. Debemos hacerlo y nos concretaremos
tan s?lo a dar cuenta, en escueta relaci?n, y como Ap?ndices, de las im
prentas y peri?dicos de Vigo de que tenemos noticias, pues llegada la
?poca contempor?nea, la ?poca que todos vivimos y en que todos nos
conocemos, se hace dificil?simo entrar en cierto g?nero de coneideracio
nes que,a los contempor?neos no nos es dado ser, ni los m?s justos ni
los m?s aprop?sito y adecuados para poder juzgar con entera imparciali
dad, y libres de todo prejuicio, cuanto nos rodea.
CAPITULO X
LA IMPRENTA Y EL PERIODISMO EN VIGO
CONSIDERACIONES FINALES
Todos los peri?dicos de Vigo se han significado por su amor al pue
blo donde nacieron y a la regi?n en que se publican. Pudieron y pueden
las cuestiones pol?ticas establecer entre ellos divergencias, pero todos coin
ciden en sus buenos deseos para el engrandecimiento de Vigo, que tanto
debe a su prensa culta y defensora de sus derechos.
Por la ciudad amada, por la que es objeto y af?n de sus hijos cultos
y trabajadores, han re?ido y siguen siempre en la brecha, dispuestos a
" re?ir las m?s encarnizadas batallas. Bien haya, pues, la prensa viguesa,
centinela avanzado del progreso y prosperidad de su pueblo.
Quiz?s en m?s de una ocasi?n las pasiones pol?ticas hayan hecho
que entre ellos, hermanos todos por la sangre y por las aspiraciones, no
reinase la mayor armon?a. Quiz?s en otras la obcecaci?n o el error en ?