250 BOLET?N DE LA REAL ACADEMIA GALLEGA
Compostelana,' sus autores se ven obligados a consignar en
nos y sus revueltas, aunque sea ello para destacar m?s las
condiciones pol?ticas de su biografiado. En estos cuadros "
sombr?os los redactores nos dejaron curiosas notas pinto
rescas. L?anse los Cap?tulos CXIV, CXV y CXVI del Libro I
en donde se narran todos los pormenores de la revuelta de
los burgueses compostelanos contra el Obispo y Do?a Urra
ca, con la huida de Gelm?rez, disfrazado, por entre la turba,
y la reina, desnuda de la cintura para bajo. Ya anteriormen
te, en el Cap. XC del mismo Libro I, encontramos una gra
ciosa noticia sobre el disfraz de Gelm?rez para librarse de
sus enemigos : ?.Cuando los Galicianos llegaron a Carri?n,
que ten?an noticia del sobredicho anatema, buscaban al s
? p? o para prenderlo; mas protegido por la divina gracia, pudo
escaparse envuelto en una capa roja y cubierto con un som
brero de los que usaban los Lombardos? .
Consignada ya esta animada presencia del pueblo en la
Compostelana, nos interesa ahora recoger aquellas otras no
ticias de ?ndole ling??stica y literaria. Renunciamos a repetir
aqu? ?por estar hecho en las otras obras consagradas a esta
clase de estudios? el estado ling??stico de la Pen?nsula por
los a?os en que se redacta nuestra Cr?nica, y nos limitamos a
consignar las noticias que sobre del mismo se encuentran en
la Compostelana. Que por esta ?poca (c. 1140) estaban los
romances en su inicial florecimiento literario nos lo demues
tra elocuentemente la curiosa circunstancia de que en ese
mismo a?o se sit?a la elaboraci?n del Poema del Cid, primer
monumento de la Literatura nacional.
Aparte de este hecho tan significativo, los redactores de
la Cr?nica, inconscientemente unas veces, conscientemente las
m?s, nos suministran amplias noticias sobre este particular.
? As? nos refieren c?mo en el Concilio de Le?n (a?o de 1107)
Gelm?rez defendi? los derechos de la Iglesia de Santiago, fren
te a las pretensiones del Obispo de ,Mondo?edo, en un dis
curso pronunciado en lat?n. Quer?moniam:.. latine ventilav?t,
dice la Compostelana, lo cual nos demuestra que ya exist?a
otro lenguaje, el romance, que era el vulgar y corriente. Pero
las noticias sobre la variedad ling??stica peninsular son ma
yores y, sobre todo, m?s concretas. Para lograr un copioso