jolet?n de la Real Academia Gallega 117
oprimidos; al literato insigne, maestro de las letras castellanas, cuya
pluma estuvo siempre al servicio de la libertad, dentro del orden y de
la personalidad ?tnica de este hermoso pa?s hospitalari?; pertnitidme
que dedique ese recuerdo amoroso at que fu? primer presidente titular
y primer presidente de honor de la Asociaci?n Iniciadora y Protectora
de la Real Academia Gallega, cuyo nombre,' simb?lico para Cuba y
Galicia, lo l!evamos'grabado en el alma con caracter?s indelebles; per
mitidme, en suma, que dedique la flor m?s exquisita de mi esp?ritu ;la
flor inmarcesible del recuerdo! para unirla ? la ofrenda com?n, ya que
este act?, m?s que la persecuci?n de medicos materiales ? un noble, fin
consagrados, esta dedicado principalmente ? enaltecer, ? glorificar el
nombre inmortal de Manuel Curros Enr?quez.
Saludemos reverentemente (el orador hace una ligera genuflexi?n
ante el busto de Curros) como ? una im?gen querida, ? ese hermoso,'
ese magnifico busto en que Manuel Pascual, el tan modest() como ge
nial artista, puso toda su inspiraci?n, su alma toda para modelar la
efigie del autor insigne de Houturnio, Mirand'o Chau y A Iqrexia fr?a,
del autor'excelso d'a Virxe d'o Cristal. S?; inclin?monos reverentetnen
te ante la efigie ainada de un grande de las letras, de un elegido de las
musas, del soberano que emput??ra'en vida el cetro de nuestra po?tica
incomparable; el taumaturgo que hiciera el milagro de resta?ar his
heridas de dos pueblos hermanos, que en cruenta epopeya se inmol?ran
en la defensa de sus respectivos ideales; el eximio proscripto que eon
los resplandor?s de su genio, y desde su alta tribuna de la prensa
cubana, fu? orgullo del periodismo, galard?n del nombre espa?ol,
gloria de Galicia y honra y prez de la colonia que en este querido pals
la representa. (Nutridos aplausos).
Y tras el eco de vuestros aplausos, tras las palpitaciones de vues
tros corazones generosos, tras las efusiones de vuestros esp?ritus nobi
l?simos, emudezca la voz de un pigmeo para que Cuba y Galicia, en
conjunci?n admirable, rindan cumplido homenaje, com?n ofrenda de
amor ? un inmortal.
He dicho.