258 ijolelln de la Real 5'cademia Gallega
dos restos de nuestra venerable antig?edad. El primero nos la trascri
bi? asi :
t ERA. T. C ? XVI : El mISMI t MEMORIA
t CBES? ABBA t ADAVFVS FECIMVS
y el segundo nos la pone algo variada a saber:
t ERA. T. C. XVI EL MISM i MMRI E 0 I
t CBES? ABBA t ADA VF VS FECIMVS
que traduce D. Aureliano en el lugar citado : uA?o 1078. Memoria de
Eimmismo. C?robes abad y Adaufo la pusimos?. Las dos est?n muy
lejos de como se hallan sus letras en la piedra, tan mudadas que casi
nada tienen que ver con lo que all? est? escrito.
Y notemos ante todo que las letras, si se except?a la segunda de la
segunda l?nea, son todas claras e indudables como podr? convencerse
quien se tome la molestia de examinarlas, pues gracias a Dios se conser
va la piedra e intactas en ella todas sus letras profundamente grabadas.
La primera despu?s de la cruz, que no es la de Santiago como puso
H?bner, sino una cruz de brazos casi iguales, es como todos justamente
escriben, una E y a continuaci?n RA y despu?s un punto colocado al
medio del rengl?n como sucede siempre cuando hay uno s?lo en la ins
cripci?n. Despu?s del punto viene una I con una tilde encima que Barros
Sibelo convirti? en T. Despu?s de 1a I hay otro punto y a continuaci?n
una C con su punto despu?s seguido de una X hasta la cual ocupan todas
las ref er?das letras todo el ancho del rengl?n.
Despu?s de la X ocupan s?lo la mitad inferior de ?l una V y una I
y sobre ellas una V invertida o sea una A sin travesa?o y en seguida tres
puntos que ocupan toda la amplitud de 1a l?nea. Siguen una E y una T
manifiestas, cuya T prolonga hacia abajo, paralela a su l?nea vertical, el
extremo anterior de su horizontal como fu? frecuente en antiguos tiem
pos, y vienen despu?s ocupando s?lo la mitad inferior del rengl?n tres
l?neas verticales cubiertas por una tilde y un punto encima que rellenan
la l?nea y despu?s ocup?ndola toda una I y en seguida en la mitad inferior
una D de la cual sale un signo algo semejante a una S como se ve en la
inscripci?n de la puerta de las Plater?as de la Catedral de Santiago, y
despu?s una M que ocupa todo el rengl?n y tiene entre sus l?neas una
R naturalmente m?s peque?a. Y este grupo desde la X fu? el que mucho
extravi? al primer lector y a cuantos le siguieron.