oletln de la Real Academia Gallega 287
la Comisi?n de Monumentos de aquella provincia, pudieran en de
bida forma aclararlo (1).
Leovigildus! Suponiendo visig?tico este castillo ?no se va,
querido lector, la imaginaci?n al rey que en el a?o 586 vino a esta
tierra a dominar a los suevos y que incorpor? Galicia a la mo
narqu?a visig?tica? El, aqu? vino y aqu? venci? a Andeca, el roy
de los suevos; las noticias sobre aquella campafia son tan ?breves
y oscuras?, como acertadamente nos dice Murgu?a, que no se sabe
de fijo d?nde lo venci?, y si se dice que fu? en Braga, es porque se
supone que all? se encontraba, como capital que era suya, el rey
de los suevos (2) ; pero aunque all! fuese, ?por d?nde entr? en
esta tierra ? por d?nde sali? de ella? b No conduce a Braga la
via n.Q 18 del itinerario de 'Antonino,'que desde Astorga pasa por
Banos de Molgas? ?Y hasta all? no llega la del castillo de Litoria,
que la pon?a en comunicaci?n con la per loca maritima que por
Lugo pasaba? ?Qu? intervenci?n podia tener en aquella lucha
este castillo o' qu? necesidad, por entonces, levantarlo...?
Perdona, querido lector, que me haya separado de lo que s?lo
me propuse, que era hablarte del emplazamiento del antigu? cas
tillo de Litoria, que no conocias, y ya que hay que contener la
fantasia, ,as?mate al hermoso balc?n que este castillo te ofrece y
contempla conmigo el espl?ndido panorama de esta tierra...
ANGEL DEL CASTILLO.
?
(1) Y con ellas trazar el piano de esta fortaleza, que ahora s?lo
incompleto y dudoso lo conseguir?amos.
(2) Ni el Biclarense ni in Historia de los Suevos, de San, Isidoro;
mencionan, en in breve descripci?n de aquella campa?,a, la ciudad de
Braga, ni por aqu?lla puede deducirse el camino seguido por Leovigildo.
Por iotra parte, a nadie extra?ie, a pesar del arrianismo de este rey, in cruz
que precede a in inscripci?n del castillo de Litoria, porque tambi?n figura
en el anverso de algunas de sus monedas, y de ser suya dicha inscrip
ci?n, pudo haberse copiado de las cristianas, como in cruz sobre gradas
del reverso de las monedas de su segunda ?poca se tom? de los s?lidos
de Tiberio Constantino.