bolet?n de la Real Academia Gallega 133
una paradojaabrigar el temor de que, en la ?poca presente, se repitan.
las grandes injusticias que afean la historia de la humanidad; aunque
inveros?mil se crea que al levantarse, a costa de sacrificios inenarrables,
un monumento de gloria, haya todav?a mano aleve que empu?e la pi
queta demoledora con intenci?n de socavar sus cimientos, es una verdad
desconsoladora pero real y tangible, que la maledicencia har? esfuerzos
inauditos por; debilitar la base fundamental de la primera de nuestras
instituciones. docentes.
Empero nada habr? de arredraros en el cumplimiento de vuestro
cometido. Vuestra labor es de edificaci?n y de resistencia. A medida
qu? levant?is: una pilastra en el templo augusto de las letras, tendr?is
que suspender vuestras habituales tareas contra los ataques de vuestros
detractores, por m?s que esos ataques habr?n de ser tan d?biles; e in
ofensivos que casi no debieran preocuparnos.
Os atribuir?n?finalid?des pol?ticas; tal vez designios criminales; pero
esto es tan absurdo, tan inconcebible, que ni siquiera merece refutarse.,
Para hacer." pol?tica, no es ciertamente un centro educativo lo m?s indi
cado: la pol?tica se hace en el partido, en' el mitin, en `.la.iplaza p?blica,
nunca en el sereno recinto acad?mico, cuya atm?sfera esterilizada, pro
pia s?lo para desarrollar el polen fecundo de la vida culta, rechaza como
otros , tantos g?rmenes de muerte todo fermento de pasi?n y origen de
disputa:
Por otra parte, la' pol?tica en Espa?a, particularmente en la ?ltima
d?cada del pasado siglo, tiene el triste privilegio de representar todos
los desastres que al presente afligen a'la Patria, raz?n por:. la cual, y
aunque no sea m?s, que por eso, ser?a torpeza insigne llevar su mal?fica
influencia' al ?nico paraje a donde no deben 'llegar las rivalidades y
ambiciones del personalismo: al umbral acad?mico,' cuya independencia
de acci?n es garant?a,: la m?s firme, de la regeneraci?n denuestro:'pus,
blo, hoy por esas .causas sumido en la ignorancia, desorientado, vaci
lante, y casi sin;noci?nrde sus deberes y derechos colectivos..,
Descartados, pues, por: inofensivos, los ataques de los eternos 'ene
migos del progreso moral y material de nuestra patria nativa, reconcen
trad vuestras fuerzas .y acometed de lleno la edificaci?n,'del glorioso,m?
aumento confiado a', vuestra' sabidur?a y patriotismo.'
Galicia, si quiere fijar su personalidad como regi?n de ilustre abo ?
Tengo; ';si, ,celosa; de' sus tradiciones, abriga la leg?tima : aspiraci?n de
conservar su peculiar fisonom?a, lo primero que necesita es unificar su
lenguaje, su dulc?sima habla, que de d?a en d?a va perdiendo su pureza
en fuerza de mixtificarse, ya con la adopci?n de voces ex?ticas, bien