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64 Dolet?n de la Real %lcademia Gallega
tiempo a:huir ni a prevenirse a la defensa, hubiera sidov?ctima de las
iras populares, si la piedad de una dania de su familia no le hubiese
encomendado al eficaz cuidado de la Virgen del Rosario, envolviendole
entre las vestiduras benditas de utta imagen de ?sta. Toda la casa fu?
recorrida por los amotinados, sin que dejasen de registrar otro, mueble
que el ropero donde se hallaban los vestidos de la Virgen, que, mila
gr?samente, acababa de salvar la vida de un inocente
??Afrancesados!!,rugieron nuevaniente?y, repitiendo, enloqueci
dos, este grito de muerte, asaltaron el palacio de Ib?tiez, en el preciso
momento en que ?ste se disponfa a partir para sus posesiones de Sar
gadelos. Espole6 a la cabalgadura, y le persiguieron las tubas, vocife
rando y repitiendo sin cesar: llafrancesados!!
Poco m?s de un kil?metro Ilevaba recorrido el desventurado
Iba?ez cuando fu? alcanzado por la multitud asesina
Momentos despu?s, quedaba en el camino de la Marina, en el
lugar de Cantalarrana, el cadaver de aquel hombre emprendedor y en
tusiasta del progreso; del que habfa disfrutado del aprecio de Carlos IV
y contado con la amistad del Principe de la Paz; del que, varias veces,
habfa sido nombrado Ministro de la Corona, renunciando siempre este
honor para dedicarse al desarrollo de sus itnportantfsimas y renom
bradas f?bricas de Sargadelos, como renunciara a los tftulos de Casti
lla, bajo la denominaci?n de Marqu?s de Sargadelos, y Conde de Or.
baiceta, con que le honrara la gratitud del rey por haber" librado de
m?s de un conflicto, por escasez de numerario, al Gobierno de S. M.
All? qued? el buen patriota, el m?rtir de esta memorabil?sima y Luc ,
tuosa jornada
Habfa anochecido, y la villa hall?base en uno de esos Inomentos
de caltna que siguen a los grandes conmociones. Del convento de San
Francisco salieron sigilosamente varios religiosos con direcci?n a Can
talarrana, para recoger el cuerpo inerte de Ib?fiez, . que ellos mismos
condujeron a la iglesia converitual, d?nde le dieron cristiana sepultura..
Fr. Manuel Cuervo, compafiero de Ib?nez en la Junta de Gobierno, re
cit? un responso, y el p?rroco, D. Juan Francisco do la Iglesia, tam
bi?n Vocal de la misma Junta, extendi? la partida de defunci?n, ha
ciendo constar que cpor 'orden de la Justicia? di? sepultura al cad?ver
del Sr. D. Antonio Raimundo Ib?tiez, afallecido en el dirt de hop.
ANTONIO PEREZ MART?NEZ.
Ribadeo, Junto de 1913.