2 Dolettn de la Real Academia Gallega
la Sociedad Germana de Filolog?a Oriental, de Berlin; la Inter
nacional de Intelectuales, de Roma, etc., etc.
Hombre modesto y afable, pudo ocupar altos cargos eclesi?sti
cos, pues m?s de una vez se trat? de elevarle al epis,copado, no
consigui?ndose que aceptase, vali?ndose de sus amistades para que
no se le obligase a aceptar la mitra ni otros cargos en la curia
eclesi?stica, content?ndose siempre con ser sacerdote sencillo y
humilde, pues necesitaba disponer del tiempo para sus trabajos y
estudios.
Bien quisi?ramos hacer una biograf?a del sabio que es honra
de Galicia, pero otros son los llamados a ello, cuando mitigado el
dolor que ha causado su inesperada muerte puedan con calma
aquilatarse los m?ritos que con la ciencia contrajo tan eminente
sabio. Nos limitaremos a consignar que vi? la luz en la pintoresca
feligres?a de San Ver?simo de Barro (Pontevedra), el a?o 1870, que
hizo sus primeros estudios de Latinidad, Humanidades, Filosof?a
y Teolog?a y el primer curso de Derecho Can?nico en el Semina
rio de Santiago, marchando pensionado a Roma; y en la Univer
sidad Gregoriana termin? los estudios de Derecho Canonico, y en
el de Apolinar los de Derecho Romano, ampliando los de Filosof?a
y Teolog?a en la Academia de Santa Teresa, perfeccionancto sus
conocimientos en las lehguas orientates, egipcio y copto, ?rabe, etc.,
teniendo por profesor al ilustre orientalista Gismonde.
De Roma vino a Santiago llamado para desempe?ar la c?tedra
de Teolog?a en la Universidad Pontificia, cuando s?lo ten?? vein
tisiete a?os, continuando como catedr?tico en este centro al frente
de otras c?tedras, desempe?ando a la vez otros cargos como exa
minador sinodal, vicario capitular, secretario de las causas de pro
ceso can?nico seg?n el M?xima Cure, juez en las causas del tri
bunal colegiado, etc.
Como publicista se distingui? de una manera notable, y su
nombre perdurar? siempre por la lama de sus magnas produc
ciones, siendo su obra cumbre Los problemas fundamentales de
la Filosofla g del Dogma, que se tradujo al ilaliano, al holand?s, al
h?ngaro y al alem?n, obra en dos tomos, calificada en Europa como
maestra, que hizo fuera consultada de todas partes sobre los m?s
intrincados problemas de la ciencia, manifest?ndose cbmo cr?tico
profundo y maestro en todo, lo que hizo decir al profesor Herranz :
?Estamos plenamente ante un caso extraordinario; aquella inteli
,gencia es inteligencia asombrosa,.