?lel?n"de' la Real ylc?demia Gallega 215
No dieron resultado los bnenos deseos del celoso intendente entre
los`naturales del pa?s, pues, apegados ? la rutina,` cre?an m?s beneficio
so para ellos seguir 'explotando' como hasta entonces ? los sencillos'
pescadores, sujetos cada vez m?s ? imposibilitados para secundar ini
i ciativas, por lo que, "lejos' de ser beneficioso, les perjudicaba: el mono
polio de la pesca ? s?lo los matriculados.
L?s especuladores' del interior que se ve?an imposibilitados de au
mentar ? continuar' su negocio por estarles vedada la pesca, y por la'
disminuci?n de pescadores gallegos que elud?an la matr?cula por no
verse sujetos toda la vida ? la Armada, parece que determinaron traer;
catalanes para que por cuenta`' de los comerciantes se dedicasen ? las
industrias del mar. Bien fuera aQ? ? bien iniciativa de los interesados,
presto los catalanes se posesionaron de toda nuestra costa y fundaron
entre s? asociaciones para ejercer por su sola cuenta la pesca con el
auxilio de javegas, artes, bou ? ron, boliche y otros aparejos usados en
I Levante haciendo competencia ? "los pescadores gallegos que s?lo se
val?an de la rapeta, chinchorro, tra?lla, cedazo y jeito (1) los cuales en
muchos casos quedaban reducidos ? braceros ? jornaleros de los cata; ,
lanes, al decir de los competidores de estos ?ltimos, cuando, seg?n no
sotros juzgamos, no era sino cambio de amo, y con mayores ventajas
para los pescadores gallegos, pues ahora ten?an dos en que escoger,
para irse con elque m?s cuenta le tuviere: el de casa y el forastero (2).
Los natura les`"del ` pa?s y los ya establecidos " en ?l, especialmente
los que explotaban las necesidades de los pescadores, no pudieron, no
supieron ? no quisieron contrarrestar la actividad y esp?ritu empren
dedor de los catalanes que ven?an ? hacerles una concurrencia formi
dable, pues ? la vez eran pescadores y salazoneros, y al poco tiempo en
(I)` Para la descripci?n de los aparejos de unos y otros pueden verse:
JOSHEPH CORNIDE: Enrayo Mara una historia de las peces y otras producciones marinas ?
de la costa de Galicia con un tratado de diversas pescar, redes y aparejos con que se practi
can. Madrid, Benito Cano, 1788.
ANTONIO S??EZ REG?ARD: Diccionario hist?rico de la pesca, 4 tomos. Madrid; 1791.
(2) Estos pod?an sin inconveniente ejercer la pesca, pues aun cuando matriculados
e? apariencia ? no?ven?an provistos de licencias temporales de su departamento, y a?n
.cuando no las renovasen, estaban exceptuados del servicio de la Armada, lo que constitu?a
`un' privilegio y les permit?a consagrarse con ahinco ? labrarse una fortuna. A los gallegos ?
no les era f?cil, pues ? lo mejor los sorprend?a el llamamiento de la marina.